The Last Guardian: con las emociones a flor de piel

La relación entre el niño y Trico, como eje argumental de uno de los títulos más esperados

A más de uno le puede parecer mentira, pero el lanzamiento de The Last Guardian está a la vuelta de la esquina. Falta un mes para que el nuevo proyecto de Fumito Ueda llegue a PlayStation 4 y, sabedores de las ganas que buena parte de los jugadores de la consola de sobremesa de Sony tienen de hincarle el diente a la propuesta, durante las próximas semanas realizaremos algunos artículos y reportajes especiales en LaPS4, para hacer más llevadera la espera e intentar desgranar algunos de los aspectos más interesantes del título antes de su puesta de largo.

Para comenzar nuestro particular viaje, nada mejor que un repaso a lo poco que sabemos hasta el momento de esa relación tan especial que parece unirá a Trico y al pequeño protagonista de la aventura. Los juegos anteriores de Ueda saben mucho de emociones y parece que la parte sentimental de The Last Guardian será uno de los aspectos más destacados de la propuesta, aunque también conviene tomarse con calma el tema de las expectativas y del hype, que ya sabemos todos lo que termina sucediendo cuando nos dejamos llevar por las promesas de nuestros desarrolladores favoritos.

Puede que la relación que se desarrolla entre Trico y el niño protagonista de The Last Guardian sea el reflejo de un largo proceso de desarrollo, el mismo que ha experimentado la propuesta que inicialmente comenzó a trabajarse en las oficinas de Team ICO y que terminó recayendo en las manos de SCE Japan Studio, con algunas confusiones en torno al papel de Fumito Ueda durante todo este tiempo, cuestiones todas ellas de las que se ha hablado largo y tendido durante los últimos años. The Last Guardian comenzó a desarrollarse de manera oficial en 2007, aunque no fue hasta el E3 de 2009 que pudimos verlo por primera vez, en la conferencia previa al evento que Sony ofreció a todo el mundo.

The Last Guardian nació como un proyecto para PS3 y terminará saliendo para PS4, aunque esto no supone ningún cambio significativo para uno de sus principales ingredientes, más allá de cuestiones jugables de las que poco hablaremos en este texto. Team ICO es uno de esos estudios de culto que cuenta sus juegos por obras maestras, capaces de emocionar y conmover a todos aquellos que se lanzan a descubrir su planteamiento. Títulos como Ico o Shadow of the Colossus son considerados como algunos de los máximos exponentes de lo que un videojuego puede hacer en materia emocional, por lo que este The Last Guardian que tanto esperamos aspira también a ocupar un lugar de honor en nuestro corazoncito de jugadores.

La relación entre Trico y el pequeño protagonista funcionará como eje argumental evidente de toda la aventura, en la que deberemos afrontar múltiples puzles y rompecabezas (plataformeros y de otra índole) que marcarán el apartado jugable de la obra. Pero será la cambiante relación entre los protagonistas la que nos permitirá descubrir el lado más humano de The Last Guardian. Como ya sabemos todos a estas alturas, la relación entre el niño y Trico comenzará bruscamente, casi por accidente, como casi cualquier relación. Sabemos que Trico será una criatura hostil al principio de la aventura y que en el transcurso de la misma veremos la forma en la que cambia su personalidad y la manera en la que se establece el contacto con el pequeño.

Ueda y su equipo querían explorar este aspecto cambiante de una relación, la evolución constante entre dos criaturas muy diferentes, algo con lo que ya habían jugueteado en el pasado, aunque no de forma tan directa como en The Last Guardian. En los vídeos ingame que hemos tenido ocasión de ver hasta el momento descubrimos enfados en Trico o muestras de cariño por parte del niño hacia una criatura de otro tiempo. En el tráiler del E3 2016 pudimos ver que existía al menos otra criatura similar a Trico en The Last Guardian, aunque desconocemos qué papel jugará en la trama o si su única función será la de villano ocasional.

Además de tráilers y vídeos, durante los últimos meses hemos tenido ocasión de probar The Last Guardian en varias ocasiones, por lo que en la redacción nos preguntamos si el funcionamiento de la Inteligencia Artificial de Trico estará a la altura de las circunstancias o tendremos que dejarnos llevar mucho para que las posibles incongruencias que veamos en pantalla no nos afecten a la hora de ver y vivir esa evolución de la relación entre protagonistas. El título de Ueda no es el único que en los últimos años apuesta por ahondar en esta temática, por lo que deberá hacer las cosas muy bien para que no estemos constantemente recordando los juegos más recientes que han desarrollado este aspecto de forma notable.

Hablamos, por ejemplo, del The Walking Dead de Telltale, en cuya primera temporada veíamos como la relación entre Clementine y Lee evolucionaba de manera magistral durante sus cinco capítulos. También nos viene a la mente The Last Guardian, que desarrollaba una historia similar entre Joel y Ellie. Aunque son propuesta de géneros muy diferentes, también hemos visto como la forma de relacionarnos con otros personajes, en títulos de sagas como Mass Effect o Dragon Age, se sentía justa en respuestas a nuestras acciones. Un aspecto tan personal y humano como es el de las relaciones emocionales se ha convertido en tema recurrente durante los últimos años, por lo que será interesante ver qué aporta realmente al asunto lo nuevo de Ueda.

Además del propio reto que supone representar la evolución de una relación en un videojuego, el equipo de Japan Studio y de Ueda se enfrenta a la compleja situación de no caer en la lágrima fácil o en la tramposa maquinaría del final triste. En toda esta amalgama de sensaciones que promete The Last Guardian jugará un papel fundamental su banda sonora, de la que hemos podido escuchar algunos acordes durante los últimos meses y que aspira a ser otro de los aspectos que ayuden a llevar su profundidad emocional hasta donde esperan los aficionados y seguidores de la obra de Ueda.

The Last Guardian estará en las tiendas el siete de diciembre y después de tantos años de espera parece mentira que vayamos a poder hincarle el diente. Aunque posiblemente no se trate de un superventas como Uncharted 4, PS4 necesita ampliar su catálogo de exclusivos con títulos que vayan más allá de un apartado técnico apabullante, por lo que una obra tan emocional y visceral como la de Ueda y Japan Studio resulta de lo más interesante para la ampliación de la biblioteca de juegos de la consola de sobremesa de Sony. 2016 terminará con dos de los títulos más comentados de los últimos años (el que nos ocupa y FFXV) en las tiendas y a nuestro alcance, por lo que esperamos poder analizar hasta el último detalle de ellos, incluyendo esa relación tan especial que parece que madurará entre Trico y el pequeño protagonista de The Last Guardian.