- Unido
- julio 17, 2015
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En una galaxia muy, muy lejana... llegó Electronic Arts y nos sorprendió mucho tras jugar a su Star Wars: Battlefront II. Porque es un juego diferente al primero de 2015, porque han complicado todo -en el mejor sentido de la complicación-, y porque ha dado un salto gráfico y jugable que lo puede convertir en el shooter del año, esta vez sí. El evento EA PLAY que abre el E3 2017 de Los Ángeles nos ha servido a mi compañero Sergi González y a mí para poder descubrir multijugador y campaña de lo nuevo de EA DICE, un juego nacido del feedback que recibieron con el primero, que cambia para siempre el controvertido sistema de héroes, villanos y naves, y que ha utilizado el majestuoso escenario de Naboo y su palacio imperial para dejar boquiabierto al personal. Se pierden la aleatoriedad y la poca personalización, se gana mayor profundidad de gameplay y posibilidades de coordinación de equipo, ahora con escuadras, clases muy marcadas, selección de armamento y accesorios, y modos y contenidos por doquier.
Star Wars Battlefront 2 es más táctico, más pausado pero no por ello menos espectacular que el de hace año y medio. Tampoco es un Battlefield; sigue teniendo identidad de tacto única y particularidades fuertes, que vuelven a impulsarse con un nivel de obsesión por el fan service que los fans de la saga ideada por George Lucas llevaban mucho tiempo soñando. El sonido, estruendoso, y todos los efectos visuales con el mejor resultado que se ha visto jamás con el motor gráfico Frostbite engalanan un FPS -o third person, a elección- donde se mata tanto como se corre y coloca, ahora con más importancia para la cobertura y la toma de posiciones estratégicas. El mapa de Naboo es genial, repleto de pasillos y recovecos, con zonas marcadas para cada etapa de la batalla, desde las iniciales grandes avenidas, puentes y soportales hasta la plaza del palacio y finalmente el propio palacio por dentro, recordando plenamente a los interiores de Battlefield 1, con escaleras, pasadizos y salones de lujo donde enfrentar a droides de la Federación de Comercio -el bando que hemos jugado con Darth Maul y Boba Fett de héroes aliados- contra el Ejército de la República Galáctica, con Rey y Han Solo a su lado.
Y esta guerra por capítulos que será cada partida se convierte también en una escalera de etapas cada vez que se muere, donde hay opción a cambiar de clase y a comprar con puntos -los anotados con bajas y otros objetivos- acceso a naves, vehículos especiales o invocación de héroes o villanos. Es decir, se acabaron las monedas aleatorias que van reapareciendo para invocar aliados especiales o surcar los cielos en caza. Se ha mejorado, digamos, cómo funcionan las recompensas y ahora para tener esas ventajas momentáneas habrá que hacer partidas decentes, lo que también limita más la aparición de héroes y les da un tono más épico y letal cuando entran en escena. De hecho, y esto resulta casi increíble teniendo en cuenta la base de la que se viene, es importante estar en coordinación con el resto de la escuadra, con los otros tres soldados compañeros directos. Ahora solo queda que, de verdad, todos los personajes invocados estén equilibrados en poder y se tire de unos y otros indistintamente.
Por su parte, la campaña ya podemos decir también que promete y mucho. La historia es canon de la serie, contando lo que pasó entre El Retorno del Jedi y El Despertar de la Fuerza, con una Iden Versio que parece tener mucho carácter y nos va a dar grandes momentazos. Al menos por lo visto en estas primeras andanzas entre explosiones, scripts, cinemáticas y entornos lineales pero cargados de detalle y referencias. Esperamos variedad de situaciones para cada acto, aunque no podemos decir lo mismo de la duración, más en entredicho y que estimamos la habitual, de 5 o 6 horas. Y una buena noticia final, toda la primera temporada de contenidos se ofrecerá gratis, en un juego que ya de base va a triplicar en contenido al predecesor. Ahora queda por saber cuánto dura exactamente eso que EA llama "primera temporada".
Star Wars Battlefront 2 es más táctico, más pausado pero no por ello menos espectacular que el de hace año y medio. Tampoco es un Battlefield; sigue teniendo identidad de tacto única y particularidades fuertes, que vuelven a impulsarse con un nivel de obsesión por el fan service que los fans de la saga ideada por George Lucas llevaban mucho tiempo soñando. El sonido, estruendoso, y todos los efectos visuales con el mejor resultado que se ha visto jamás con el motor gráfico Frostbite engalanan un FPS -o third person, a elección- donde se mata tanto como se corre y coloca, ahora con más importancia para la cobertura y la toma de posiciones estratégicas. El mapa de Naboo es genial, repleto de pasillos y recovecos, con zonas marcadas para cada etapa de la batalla, desde las iniciales grandes avenidas, puentes y soportales hasta la plaza del palacio y finalmente el propio palacio por dentro, recordando plenamente a los interiores de Battlefield 1, con escaleras, pasadizos y salones de lujo donde enfrentar a droides de la Federación de Comercio -el bando que hemos jugado con Darth Maul y Boba Fett de héroes aliados- contra el Ejército de la República Galáctica, con Rey y Han Solo a su lado.
Y esta guerra por capítulos que será cada partida se convierte también en una escalera de etapas cada vez que se muere, donde hay opción a cambiar de clase y a comprar con puntos -los anotados con bajas y otros objetivos- acceso a naves, vehículos especiales o invocación de héroes o villanos. Es decir, se acabaron las monedas aleatorias que van reapareciendo para invocar aliados especiales o surcar los cielos en caza. Se ha mejorado, digamos, cómo funcionan las recompensas y ahora para tener esas ventajas momentáneas habrá que hacer partidas decentes, lo que también limita más la aparición de héroes y les da un tono más épico y letal cuando entran en escena. De hecho, y esto resulta casi increíble teniendo en cuenta la base de la que se viene, es importante estar en coordinación con el resto de la escuadra, con los otros tres soldados compañeros directos. Ahora solo queda que, de verdad, todos los personajes invocados estén equilibrados en poder y se tire de unos y otros indistintamente.
Por su parte, la campaña ya podemos decir también que promete y mucho. La historia es canon de la serie, contando lo que pasó entre El Retorno del Jedi y El Despertar de la Fuerza, con una Iden Versio que parece tener mucho carácter y nos va a dar grandes momentazos. Al menos por lo visto en estas primeras andanzas entre explosiones, scripts, cinemáticas y entornos lineales pero cargados de detalle y referencias. Esperamos variedad de situaciones para cada acto, aunque no podemos decir lo mismo de la duración, más en entredicho y que estimamos la habitual, de 5 o 6 horas. Y una buena noticia final, toda la primera temporada de contenidos se ofrecerá gratis, en un juego que ya de base va a triplicar en contenido al predecesor. Ahora queda por saber cuánto dura exactamente eso que EA llama "primera temporada".
El hype
- Un espectáculo visual que vuelve a impresionar
- Mucho más profundo, táctico, complejo y coordinado
- Sistema de recompensas y puntuación mucho más justo
- Se elimina la aleatoriedad de las monedas para naves y héroes
- Personalización avanzada
- Prometen el triple de contenido respecto al primer Battlefront
- Fan service extremo
- Contundente sonido Frostbite
Las dudas
- Campaña lineal, pasillera y quizá no muy larga
- Duración real de la primera temporada de contenido adicional gratuito
- Queremos balance perfecto entre todos los héroes y villlanos
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