De vez en cuando vemos a actores de alguna de las películas de Marvel Studios que de buenas a primeras, rompen su relación con el estudio y dejan de interpretar a los personajes para los que fueron contratados. Uno de estos fue fue el del conocido actor Edward Norton y su papel de Bruce Banner / Hulk en “El Increíble Hulk”, la que fuese la segunda película que hacía Marvel Studios allá por 2008.
Varias pullas se lanzaron uno y otro lado. Kevin Feige, presidente de Marvel Studios llegó a decir que Norton no era una persona adecuada para trabajar en equipo y que por ello decidieron prescindir de él para futuras apariciones del personaje, a lo que Norton y su representante contestaron apuntando a que debido más bien a un desacuerdo a nivel económico, pues hubo negociaciones que al final no llegaron a buen puerto. Sin embargo, Feige dijo después que no llegaron a a haber siquiera negociaciones.
En una nueva entrevista en la que le han preguntado al respecto, Edward Norton ha cambiado su discurso dando un motivo diferente a los previamente comentados, y que sería diferencias creativas. Esta es la típica excusa que se da para ser políticamente correcto, aunque en este caso, sabemos que con el actor Edward Norton suele ser habitual que haya problemas entre director y actor o estudio y actor por problemas a nivel creativo. Es más, Norton dejó de participar en la campaña promocional de la película “El Increíble Hulk” porque discrepaba en la decisión de eliminar una serie de escenas.
De este modo Norton asegura que su ruptura con la franquicia de los Vengadores fue una elección creativa, escudado sobre la idea de que aunque disfrutó la experiencia de interpretar a un superhéroe de cómic, sabe que rápidamente se quemaría de interpretar al mismo personaje en el mismo escenario una y otra vez. Igualmente, dice que no quiere comprometerse en materia de calendario con Marvel porque estaría perdiendo potencialmente otras oportunidades, como la de la película “Moonrise Kingdom” de 2012.
Como siempre, nunca se acaba sabiendo el verdadero motivo, pero tenemos aquí presente los dos recurrentes: diferencias creativas y dinero.