El creador de Dead Space medita dejar la industria de los videojuegos

Glen Schofield ha tenido dificultades con sus últimos proyectos.

Glen Schofield, creador de Dead Space y más recientemente The Callisto Protocol, no ha tenido unos últimos años de ensueño, precisamente por el fracaso comercial de su última obra y el cierre de Striking Distance, estudio que fue fundado para dicho proyecto.

Ahora, en un post de LinkedIn, el desarrollador habló sobre las dificultades que existen actualmente para desarrollar videojuegos; sobre todo desde el punto de vista financiero y creativo.

«En los últimos ocho meses estuve trabajando en silencio con mi hija, Nicole, en una nueva idea para un juego. Ella me la presentó e inmediatamente me encantó la idea. Era algo que nunca antes había visto. La llamábamos como una especie de subgénero de horror, era horror y algo más», asegura Schofield.

El desarrollador fijó un presupuesto de 17 millones de dólares para llevar a cao el proyecto y tener un prototipo listo junto a un pequeño equipo. Sin embargo, tuvo problemas para encontrar el financiamiento necesario y decidió desistir de su idea.

«El mes pasado decidimos rendirnos. Algunas es mejor dejarlas intactas que hacerlas más baratas. Teníamos un equipo de seis personas aquí en Estados Unidos y un equipo completo en UK. Ahora, todos están buscando trabajo. Son muy talentosos, si están contratando, hagánmelo saber».

«Sigo todavía por aquí, haciendo arte, escribiendo historias e ideas y animando a la industria, pero quizás ya dirigí mi último juego. ¿Quién sabe? Gracias por jugar mis videojuegos», cerró Schofield.

Así pues, todo indica que Schofield también ha perdido la confianza de inversores tras la decepción que representó The Callisto Protocol para Krafton; lo que dificulta su futuro de la industria.

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