Análisis – Arise: A Simple Story

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La nueva obra de Piccolo Studio trae una historia que expone la vida y la muerte desde una perspectiva sutil y sencilla. ¿Qué nos depara en este videojuego?
Por Felipe Weffer 19 diciembre, 2019

En muchos contextos hacer que poco sea más y que lo sencillo sea mejor que lo complejo es una cuestión difícil de asimilar. Sin embargo, en los videojuegos es más bien una fórmula difícil de lograr, pero cuando se consigue y se junta con un toque de sensibilidad y sutileza, se obtienen auténticas obras de arte.

Este es el caso de Arise: A Simple Story, un juego creado por la desarrolladora española Piccolo Studios, un juego Indie de modestas aspiraciones que nos sumerge en una historia entrañable y que da cátedra de cómo lograr esta fórmula de la que recién hemos hablado. ¿Quieres saber de qué va este juego? ¡Acompáñanos en nuestro análisis de Arise: A Simple Story –sin spoilers–!

Análisis Arise: A Simple Story
Las pequeñas estatuas que descubrimos en el camino representarán momentos que marcan el pasado del protagonista.

Una historia simple

En Arise: A Simple Story nos sumergimos en la historia de un anciano que, después de morir, empieza un recorrido a través de los recuerdos de su vida. Con esta sencilla premisa el videojuego nos invita a conocer cómo fue la vida de nuestro personaje y cuáles fueron los momentos que definieron su destino. Desde el instante en el que conoció a su primer amor hasta la pérdida de sus seres queridos; todas estas situaciones servirán como un medio para llevarnos a explorar distintos escenarios y sentirnos emocionalmente vinculados con este personaje.

Así es como Arise: A Simple Story nos sumerge en un mundo maravilloso que combina escenarios llenos de vida y naturaleza que fueron el hogar de nuestro protagonista en algún punto de su vida, pero también lo contrasta con algunos lugares oníricos del subconsciente de su memoria que resultan igual de espectaculares. No hay mucho más, pero con esto basta para hacernos sentir, a medida que jugamos, que debemos seguir avanzando y conocer a fondo las penas y alegrías de este entrañable anciano.

Análisis Arise: A Simple Story
Los escenarios que representan el mundo onírico de Arise no buscan responder ninguna pregunta acerca de la vida o la muerte, pero sí que están cargados de simbolismos que iremos descubriendo.

Saltos en el tiempo

En cuanto a jugabilidad, en este título nos desenvolveremos como en un plataformero de lo más sencillo, sin embargo, Piccolo Studio ha convertido el argumento del juego en un aspecto jugable: el tiempo. Así, mientras jugamos y avanzamos por cada uno de los escenarios que nos plantea Arise: A Simple Story, podremos retroceder o avanzar en el tiempo con ayuda del stick derecho del mando, algo que nos ayudará de muchas maneras: desde resolver puzzles para seguir avanzando hasta descubrir secretos y coleccionables escondidos en el mapa.

Toda esta propuesta se desarrolla a través de 10 niveles. Y sí, solo son 10 niveles los que componen el juego, pero cada uno de ellos tiene su propia frescura, ya que emplea la mecánica del tiempo de manera distinta que en los otros, lo que ayuda a evitar la sensación de repetitividad que muchos videojuegos de primer nivel generan hoy en día.

Escenarios de Arise
El equipo artístico de Piccolo Studio se ha encargado de ofrecernos un mundo vibrante y hermoso.

Puede que el juego tenga sus desperfectos en cuanto a la jugabilidad, como la escasa de dificultad de los puzzles y el poco control que tenemos de los saltos del personaje. A pesar de ambos detalles, son cosas que no impactan significativamente en lo que busca ofrecer el juego: una experiencia amena en la que sensibilizarse y disfrutar.

Uno de los videojuegos más hermosos del 2019

¿Qué de malo podemos sacar del trabajo artístico de Arise: A Simple Story? En mi opinión, estamos frente a uno de los videojuegos más hermosos del 2019. No solo por el argumento, sino por el excelente trabajo de diseño y paleta de colores empleados en cada uno de los escenarios que componen el juego. Desde montañas con riscos, pasando valles repletos de girasoles hasta los mundos oníricos de la psiquis de nuestro personaje… Todos y cada uno de ellos está dotado de colores y detalles artísticos que sensibilizan y complementan lo que es y significa la aventura que estamos viviendo.

arise a simple Story
Hacer avanzar o retroceder el tiempo nos permite observar cambios en nuestro entorno y descubrir detalles, secretos y caminos por seguir.

Lo mismo que decir acerca de la banda sonora del juego, la cual cuenta con composiciones que transmiten emociones tan intensas como melancolía y felicidad con igual espectacularidad. Cada pieza del soundtrack se acopla a las cosas que van ocurriendo y vamos descubriendo, lo que intensifica aún más la experiencia.

La sutileza de Arise

Epilogo de Arise
En Arise: A Simple Story no conseguiremos diálogos de ningún tipo, ya que la historia se nos va contando de forma implícita a través de lo que jugamos y vivimos.

Decir que Arise: A Simple Story es un juego entrañable en todos sus aspectos no es poco.  Las evidentes limitaciones del estudio indie que ha desarrollado este videojuego han servido más bien como un punto de apoyo para crear una experiencia única, hermosa, divertida y recordable. Es un título que ofrece mucho a través de la fórmula de la sencillez y el minimalismo, en donde cada detalle es aprovechado al máximo para aportar algo significativo en la aventura.

85
Jugabilidad: 7.5
Gráficos: 8.5
Sonido: 9
Satisfacción: 9

Análisis

Arise: A Simple History es un juego para disfrutar a nuestro propio ritmo. Su escasa dificultad lo convierte en una experiencia que gusta más por las emociones que nos genera que por sus posibilidades "in play". La desarrolladora española Piccolo Studios ha utilizado al máximo sus recursos y ofrece en este título un ejemplo que seguir para el camino de los videojuegos.

  • El argumento del juego es una maravilla
  • Escenarios y apartado artístico espectacular
  • Banda sonora para el recuerdo
  • Las mecánicas de alterar el tiempo han sido bien logradas y dotan de frescura la jugabilidad
  • El título dura unas 4 horas, algo que a muchos jugadores dejaría insatisfechos
  • La poca dificultad de los puzzles