Análisis Need for Speed: The Run
Ficha técnica
- Título: Need for Speed: The Run
- Desarrolla: Black Box
- Distribuye: Electronic Arts
- Género: Conducción
- Voces: Español
- Textos: Español
- Lanzamiento: 18/11/2011
- PEGI: +16
Introducción

Need for Speed The Run es una nueva entrega de una franquicia de conducción que ha pasado por un montón de temáticas diferentes y que está siendo tan explotada que hay que buscar nuevas vías para que cada entrega no parezca un calco una de otra.
En esta ocasión se optó por añadir una historia muy cinematográfica sobre las aventuras de Jack, un buscavidas con muchas deudas a sus espaldas que tendrá que saldar, y es en ese punto donde entra en juego la conducción; para tratar de ganar el dinero suficiente para finiquitar esas deudas y conseguir salvar su vida de los cada vez más comunes ataques por parte de la mafia.
Desarrollado por Black Box, los mismos creadores de Need for Speed: Undercover, posiblemente el juego más criticado de la extensa franquicia Need for Speed, vamos a comprobar en las siguientes líneas si el resultado ha sido bueno o por el contrario este juego parece un Undercover 2.
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Jugabilidad
El principal modo de juego es La Carrera (The Run) consistente en una competición desde San Francisco hasta Nueva York. Este recorrido estará dividido por etapas, finalizadas las cuales deberemos estar por debajo de una posición determinada para pasar a la siguiente, todo ello mientras molestan tanto policía como mafia.

Estas etapas a su vez se dividen en diferentes pruebas: adelantar a un número determinado de corredores en un recorrido o contrarrelojs con checkpoints que aumentan el tiempo, por citar un par de ejemplos. No faltaran las fases contra «jefes» auténticos cara a cara en los que, de ganar, obtendremos el coche de ellos como recompensa. Hablando de coches, cuando se quiere cambiar de uno a otro de los que tengamos en nuestro poder, pasamos por unas gasolineras en medio de los recorridos de las diferentes etapas, recordando mucho a los desguaces de Burnout Paradise, obra de Criterion Games, los creadores de Need for Speed Hot Pursuit.
Precisamente hablando del último título arcade de Need for Speed es cuando comenzamos a ver los principales problemas de The Run. El sistema de control va muy justito. Domar los caballos de los motores de las bestias que se incluyen en el catálogo se antoja complicado, cuando aún dividiéndose los coches según su manejo, éste se vuelve muy complicado pues el coche culea demasiado en las curvas, ya se opte por soltar acelerador y no digamos si pisamos el freno. Dominar las curvas se vuelve muy dificil y eso no ha gustado demasiado, tirando en gran medida por tierra el buen trabajo realizado en el anteriormente citado Hot Pursuit.

La duración del conjunto tampoco ayuda en demasía. Terminar La Carrera se puede hacer fácilmente en unas 3-4 horas. Para ayudar a expandir el modo principal se han añadido una serie de desafíos, pero que tampoco harán que el juego dure 50 horas. Siempre queda la opción de engancharse al online, donde podemos retarnos con nuestros amigos mediante el sistema Autolog, tan loado en títulos anteriores y que vuelve a estar presente en esta entrega.
Por último, un detalle a comentar: al destrozar nuestro coche el juego incorpora unos «replay» al más puro estilo de los juegos de conducción de Codemasters, sólo que en esta ocasión son automáticos, algo así como puntos de control. Este sistema no termina de convencer, pues de pasar por uno de esos checkpoints en mala situación, volveremos a aparecer con ese lastre, convirtiéndose algunas fases en auténticos bucles sin solución.
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Gráficos
A nivel gráfico, debido al uso del motor gráfico Frostbite 2, el mismo de Battlefield 3 pocas pegas se puede poner. En las escenas cinemáticas, donde el juego muestra las escenas de mayor acción el resultado es excepcional, mostrando los personajes una fidelidad a los actores que los interpretan. Nada más hay que fijarse en Irina Shayk para comprobar esto.

Ya en La Carrera podemos observar la diversidad de paisajes que permite un evento de ese tipo, que va de costa a costa de Estados Unidos mostrando mucha variedad de paisajes (desde terrenos áridos y desérticos a paisajes nevados pasando por grandes urbes) todos ellos perfectamente recreados.
Los otros protagonistas del juego: los vehículos, como suele ser habitual en las últimas entregas de Need for Speed están perfectamente modelados, con un resultado de apariencia muy próximo al que se puede ver en Gran Turismo 5. Entrar en el modo foto y observar desde cerca los detalles de carnicería es como tener delante el modelo real del coche. Una pequeña pega es que los interiores no están tan detallados como por ejemplo en Shift 2.

En líneas generales, el uso del Frostbite 2 ha mejorado casi todos los aspectos en comparación con las últimas entregas de la franquicia.
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Sonido
El juego viene completamente doblado al castellano, algo que se agradece para enterarse del nada complejo por otra parte, argumento incluido esta vez en el juego.
La Banda Sonora cumple su objetivo de acompañamiento musical principalmente en los menús aunque es algo floja, pues no hay ningún tema que quede en la memoria tras un tiempo sin jugar.

Por último, no por ello menos importante, los efectos sonoros. Como viene siendo habitual en la serie cada coche tiene el sonido de motor que corresponde a la realidad y no sonidos genéricos. Además, situaciones como derrapes o choques tienen su sonido apropiado.
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Conclusiones
Como decía cierto eslógan publicitario, creo recordar que de neumáticos Pirelli, «la potencia sin control no sirve de nada». Esto se aplica perfectamente a Need for Speed The Run, un juego con un apartado técnico excelente, pero que ni por planteamiento ni por manejo llega a enganchar.

Si hace exactamente un año desde su lanzamiento no se hubiera puesto a la venta Need for Speed Hot Pursuit, otro gallo cantaría, pero es que en este Need for Speed The Run se echa por tierra todo lo ganado en Hot Pursuit y se recuperan muchos de los defectos que lastraron Undercover de gran promesa a juego mediocre de conducción.

El público no ha respondido como se esperaba y el juego ha bajado rápidamente de precio, lo que puede ser una buena opción para que al menos probéis la originalidad de un título de carreras con argumento, algo poco usual aunque tampoco es que el argumento sea de película. El guión está cogido con pinzas aunque la inclusión de fases fuera del coche o el uso de Quick Time Events, puede gustar a los fans del género de Acción/Aventuras.