Análisis Madden NFL 17

España es un país donde prácticamente todo aquello que se aleja del fútbol pasa un poco inadvertido; a no ser que se celebren unos Juegos Olímpicos, o un Rafa Nadal o un Pau Gasol de turno surjan de repente para ganarlo todo en algún deporte que hasta la fecha no contaba con ningún tipo de popularidad. Si además la disciplina tiene su razón de ser en otra nación, la cosa se pone todavía más complicada, y salvo la existencia de un marketing brutal detrás sería raro que ni tan siquiera un solo día del año algo así copara las portadas de webs y periódicos.

Esta descripción podría adaptarse perfectamente al fútbol americano, sobre todo la última parte, porque la Super Bowl (como gran herramienta publicitaria) al menos nos recuerda su existencia una vez al año. Tanto como para colocar un par de “trending topics” en Twitter de madrugada y comentar al día siguiente la impresionante actuación de las estrellas más famosas del panorama musical en el descanso de la final de la NFL. Tal vez por eso llevamos tanto tiempo sin que Madden NFL, una de las grandes franquicias deportivas de EA SPORTS, se cuele en las estanterías de las tiendas del país. Porque a pesar de ser conocida la competición y el deporte, poco más trasciende de él en los medio de comunicación.

Pero metiéndonos ya en faena, el mayor o menor desconocimiento que pueda tener el país en los grandes astros de la NFL, no impide que un videojuego que representa tan bien la esencia de este deporte se pueda disfrutar. De hecho, posiblemente la franquicia Madden NFL sea una de las más sólidas y de mayor calidad de EA SPORTS, mirando de tú a tú FIFA sin ningún tipo de complejo. Y menos aún con este Madden NFL 17, que con todo lo jugado y observado acaba siendo una de las entregas más sólidas de los últimos tiempos.

Y para paliar de alguna manera la carencia que muchos tenemos de conocimientos del fútbol americano de consecuencia directa con lo primero que he expuesto, Madden NFL 17 tiene como primera virtud uno de los mejores tutoriales (y más necesarios) que haya podido disfrutar en un juego de deportes. Dada la vertiente de ataque y defensa que existe en la disciplina, entrenar y aprender cada unas de las acciones posibles es fundamental para sacarle el máximo partido a un juego que para nada es fácil (aunque algo más que sus anteriores entregas), pero que te permite empezar a manejarlo correctamente si eres capaz de entender ciertas mecánicas. No es algo que no se haya visto en otros juegos, pues hasta juegos tan alabados como NBA 2K necesitan casi de los tutoriales para poder sacarle el máximo partido.

Superada esta barrera para el usuario, uno se encuentra un juego de EA SPORTS en muchos sentidos, principalmente, en los modos de juego. Brilla con luz propia en Madden NFL 17 el Ultimate Team de la misma forma que lo hace en la saga FIFA. No en balde, esta franquicia fue la primera en implementar una modalidad que a la postre fue la gran abanderada en otros titulos de deporte, y tal vez justo por eso uno se encuentra una gran cantidad de posibilidades que lo desmarcan como el más grande de todos los demás juegos.

La mecánica muchos ya la conocéis: formar un equipo con la colección cromos disponible y ponerlo a competir con otros jugadores alrededor de todo el mundo en busca de recompensas que te enganchan y te animan a seguir más y más. De la misma manera que hay un tutorial para aprender a jugar, también lo hay aquí para conocer todos los entresijos de las opciones no conocidas y que también ayudan a dominar una modalidad que seguramente acapare el mayor número de horas dedicadas al juego.

Pero la novedad en esta entrega no pasa por el Ultimate Team, que todo el mundo sabe lo bien que funciona, sino por un modo franquicia que esta vez permite jugar los momentos cruciales de un partido para hacer de todo el entramado de juego algo mucho más ágil y rápido. Una decisión acertada ésta que da más dinamismo a las temporadas, pero cuya característica de simplificación parece haberse extendido al resto de opciones de la modalidad. No he visto en ningún momento posibilidades tan profundas como sí se detectan en, por ejemplo, en los juegos de fútbol. Pero de cualquier modo aquí se sitúa parte de la fuerza del juego, sobre todo gracias a la posibilidad de encarnar al manager de un equipo (o crearte uno propio) y poder hacer las gestiones necesarias para cumplir con el objetivo que te han dado.

Donde sí flaquea el título es en su potencial en el online. A excepción de los dos modos comentados, pocas opciones hay más allá de un ranking y lo siempre habituales partidos amistosos. Este hecho provoca que Ultimate Team, como he comentado anteriormente, acabe siendo el pilar maestro de todo este juego, pues justo su naturaleza en línea lo hace clave para poder jugar al fútbol americano con todo el mundo.

A nivel técnico llama la atención que Madden NFL 17 no usa el motor Frostbite, como sí lo hará la entrega de este año de FIFA. Llama la atención pero no es una mala noticia, porque el Ignite Engine se muestra sólido y a un gran nivel, y ayuda a que el juego luzca esa imagen de solidez que muestra en todos los sentidos. Un nuevo motor implica siempre riesgos, más allá de la tecnología que pueda usar para mejorar la apariencia de un juego. En este caso, y dado el gran nivel que además se aprecia en el modelado de los jugadores (ojo al detalles de los cascos) y del terreno de juego, desde luego que no se echa en falta la herramienta de DICE.

Eso sí, la mala noticia de Madden NFL 17 es que no viene traducido al castellano. Si ya hablamos de que es complicado que un deporte que no tiene repercusión en la prensa pueda ganar adeptos, que su videojuego no cuente con la traducción correspondiente supone una barrera de entrada más. Sin embargo, si se supera este contratiempo y no hay problema con el inglés, uno se encuentra con ante un simulador más que notable que transmite todo lo mejor de un deporte tan espectacular como diferente a lo que estamos acostumbrados en el Viejo Continente.