Planificar, ordenar y ejecutar. La saga Clancy despliega su fortaleza en la estrategia táctica masiva.
EndWar nace con la intención de convertirse en la primera franquicia seria de estrategia en consolas. Para ello cuenta con numerosos argumentos, entre ellos un revolucionario control por voz, un uso del pad muy cuidado y una campaña on-line de altura. ¿Es suficiente para acercar los RTS a consolas? Descúbrelo con nosotros.
Un RTS en consolas era un concepto que a un estrato importante de los usuarios de videojuegos les parecía poco menos que una blasfemia. Sin embargo lo cierto es que se trata de un género que se ha ido haciendo sitio en la plataforma, como en su momento lo hicieron los shooters, otro estilo de juego aparentemente maldito para el pad.
World in Conflict: Soviet Assault, Halo Wars, Red Alert 3… La lista de títulos de estrategia inminentes para Xbox 360 y PlayStation 3 comienza a ser larga, y todavía lo es más si añadimos los de Nintendo DS, una videoconsola de probado rédito en el género. Sin embargo uno de los lanzamientos por el que más interés sentíamos era EndWar, la nueva entrega de la gigantesca franquicia Tom Clancy.
El título de Ubisoft se hace fuerte donde muchos otros fracasan, y brilla de sobremanera a la hora de proponer un control muy adecuado para dirigir las tropas, que consigue lo que parecía imposible: Hacernos olvidar el ratón. Sin embargo quizá echamos en falta algo más de profundidad en la propuesta, y si bien las posibilidades en cuanto a modos de juego son enormes –especialmente en la vertiente on-line-, también es cierto que a menudo sentiremos que nos falta algo de participación en todo lo que sucede en pantalla.
Poder de Mando
Uno de los mayores aciertos por parte de Ubisoft a la hora de plantear EndWar es, como decimos, el que hace referencia al control, habitual quebradero de cabeza en un título de estas características.
El modelo que ha empleado la compañía gala es similar de alguna manera al del reciente World in Conflict para Pc, tanto en el tratamiento de la cámara como en la selección y transmisión de ordenes a las unidades. Sin embargo logra expandir en diferentes direcciones esta línea, y saca partido de un aspecto tradicionalmente olvidado por los videojuegos en sus modos individuales, el de la voz
Los Headsets de Xbox 360 y PlayStation 3 van a echar humo, pues EndWar nos permite llevar a cabo todos y cada uno de los movimientos de nuestras tropas mediante el control de voz. Podemos emplear las manos únicamente para mover la cámara y obtener el ángulo más adecuado para observar la acción, y hacer todo lo demás sin tocar un solo botón.
Así pulsamos el gatillo derecho y lo dejamos apretado el programa registra nuestra voz, y podemos impartir las órdenes que deseemos. El videojuego logra una precisión espectacular a la hora de recoger nuestras instrucciones en español, y lo consigue tras realizar unos pequeños ajustes antes de comenzar a utilizar el propio título. Con esta fase de “adaptación” se nos explica como emplear el procedimiento, y éste recoge nuestra voz y volumen para serle más fácil utilizarla durante la partida.
El sistema es muy sencillo, y el videojuego registra nuestras frases palabra por palabra componiendo las órdenes, a pesar de que nosotros podemos hablarle fluidamente sin que éste tenga problemas a la hora de recoger las partes que componen nuestro discurso. Así, si decimos con total normalidad “Unidad 5 asegurar Alfa”, el videojuego reconoce las cuatro instrucciones: Unidad, para saber dónde debe centrarse; 5, para conocer cuál de nuestras unidades numeradas deseamos que escoja; Asegurar, para realizar determinada acción; y Alfa, como objetivo de entre los que hay en el mapa.
Así entre las acciones se cuentan las de Atacar, Capturar, Ir A, Retirada, Evacuar o Centrar la Cámara entre otras. Aunque también podemos acceder con la voz a las acciones para llamar a nuevas tropas al campo de batalla, solicitar apoyo de artillería o separar a nuestras tropas por clase para una mejor maniobrabilidad.
La voz es una herramienta fundamental en EndWar, pues permite llevar a cabo las diferentes órdenes a más velocidad que con cualquier otro método. No obstante nada nos priva de la opción de emplear el pad para jugar al título, y no emplear la voz en ningún momento. El videojuego también funciona realmente bien de este modo, aunque se pierde el carácter fresco del título.
El gatillo izquierdo, por último, queda para la creación de grupos pudiendo gestionar de este modo mejor a nuestras unidades. Se aprieta el botón inferior del mando para escoger a las unidades que formarán parte de este atajo, nos desplazamos por el menú inferior de tropas con la cruceta y seleccionamos cuáles deseamos que se incorporen. Todo el equipo se guarda apretando el botón superior. Un sistema sencillo que nos permite elaborar nuestros propios subgrupos, y trabajar con ellos de una forma más ágil y que, de nuevo, se adapta como un guante a las posibilidades del pad.
Acción Táctica
EndWar es un título de estrategia de corte táctico, que obvia toda la vertiente de gestión de recursos de los RTS más clásicos. Se nos planta en un mapa con un puñado de unidades, y debemos apañarnos con ellas para vencer las misiones Sin embargo podemos optar también por ir asegurando puntos de control con los que desbloquear nuevas ranuras, con un máximo de 12 unidades que podremos controlar al mismo tiempo.
Cada una de estas unidades comprende, en realidad, varias en su interior; y es que en EndWar damos las órdenes a escuadrones enteros de, por ejemplo, cuatro helicópteros, dieciséis hombres o cuatro tanques. Las opciones a la hora de trabajar con estos hombres y vehículos no son demasiadas, y quizá sea aquí donde la propuesta del título de Ubisoft encuentra sus mayores problemas.
Apenas podemos desplazarlas, atacar a los enemigos, llevar a cabo sus acciones secundarias –escasas-; y, en el caso de la infantería, entrar en edificios para parapetarnos, cubrirnos tras elementos del escenario o tomar posiciones enemigas o neutrales para sacar partido de éstas.
El título es realmente divertido, y tomar los puntos de control o someter al enemigo es un estímulo muy interesante. Sin embargo puede que a los más aficionados al género les parezca algo limitado en cuanto a posibilidades, precisamente debido a ser algo parco en cuanto a las opciones que nos brinda una vez saltamos al campo de batalla.
La cámara, además, está algo restringida por una decisión conceptual que no hemos acabado de entender. La perspectiva de EndWar está ligada a la de nuestras tropas, y a pesar de que podemos mover la cámara con toda libertad siempre tenemos que hacerlo dentro de unos límites de distancia que impone la situación de nuestras tropas. Podemos saltar de una unidad a otra y fijar la cámara cerca de ellas, pero en ningún momento podemos separarnos a cierta distancia de ninguna y, por ejemplo, explorar el mapa a nuestro gusto.
Esta restricción es una forma de focalizar nuestra atención en un punto del escenario, y de clarificar las posibilidades para los menos duchos en el manejo del pad en un título de estas características. Sin embargo el recurrir a ella por obligación se nos antoja algo exagerado. Es un matiz que recuerda de alguna manera a, por ejemplo, los Total War, que activada determinada opción en sus menús no permitía alejar la cámara de la posición de nuestro general, factor que brindaba mucho realismo a las batallas. Lo que para el título de Ubisoft es una obligación, en el juego de Creative Assembly era una opción que podíamos o no asumir.
Análisis: Tom Clancy's EndWar
5 de noviembre de 2008 / Por Álvaro Castellano Córdova Página 2 de 2
En otro orden de cosas cabe destacar que durante las batallas de la campaña obtendremos créditos que podremos emplear para comprar unidades y mejorarlas entre combate y combate, de hecho el manual incluye un listado muy detallado del coste y características de las tropas de cada facción. Sin embargo será dentro del propio juego donde estaremos siempre limitados por otro factor todavía más importante: Los puntos de mando. Con éstos podremos comprar nuevos efectivos para la batalla en cualquier momento, y contamos con 12 al comenzar que cuando se agoten irán rellenándose progresivamente para facilitarnos la contratación de más elementos para nuestro ejército.
Otro detalle que trata de aportar algo de profundidad al videojuego es el de los Apoyos Externos. Éstos aparecen en la esquina superior izquierda de la pantalla, se activan con el botón superior izquierdo del pad, y suponen elementos determinantes a los que podemos recurrir en momentos concretos de la partida para desequilibrar el conflicto a nuestro lado. Hay algunas sorpresas realmente divertidas en este apartado, pero fundamentalmente todo entra dentro de los clásicos patrones del Ataque Aéreo, Apoyo de Artillería, etcétera. Los diferentes apoyos externos tienen un coste variable en puntos de mando, con lo cual deberemos ser cuidadosos a la hora de usarlos.
Nuevo (Des)Orden Mundial
Dentro de EndWar podemos optar por tres posibilidades bien distintas. La primera es la de hacer frente a la campaña, uno de los puntos fuertes del lanzamiento. Aquí viviremos la Tercera Guerra Mundial desde los ojos de los bandos Ruso, Americano y Europeo; en un modo individual que incluye dos partes bien diferenciadas. Por un lado, y casi a modo de introducción, disputaremos las misiones de Preludio de la Guerra, en los cuales viviremos todas las acciones militares que desembocan en el conflicto armado de escala mundial en el que se convierte la segunda parte y, de hecho, la más larga e interesante.
Los tres bandos que se pueden escoger son los siguientes. En primer lugar encontramos a Estados Unidos con la JSF –Joint Strike Force-, una evolución de los marines. Su capacidad para el sigilo y su tecnología robótica son insuperables, pero donde esta facción brilla es en su conocida capacidad de combate en tierra y aire, destacando por su fuego de precisión y por la velocidad de sus unidades.
Europa brinda a EndWar sus Enforcers, pelotones de élite. Son silenciosos y precisos, y especialmente útiles para la guerra urbana. Disponen de los vehículos más rápidos y emplean armamento de energía a parte de su desmedido potencial para la guerra electrónica.
Rusia, por último, cuenta con la Brigada de Guardia Spetsnaz. Estos hombres son una fuerza letal muy experimentada en el campo de batalla. Destacan por el grueso blindaje de sus unidades móviles y por el uso de armamento pesado.
Las diferentes misiones que acometeremos son de Conquista, Asedio, Asalto e Incursión; y acaban siendo las cuatro modalidades de juego a las que nos enfrentaremos tanto en la campaña individual como en el multijugador a través de Xbox Live o en las escaramuzas. El primero nos propone asegurar más de la mitad de las conexiones de satélite del escenario, aunque también podemos destruir todas las fuerzas enemigas que encontremos. Asedio es algo más simple y nos emplaza a buscar y destruir todo rastro del ejército rival del mapa. Asalto, por su parte, busca que aseguremos la conexión por satélite de la capital de la facción oponente –sólo hay tres, por lo tanto-. E Incursión, por último, tiene como meta llevar a cabo determinadas misiones de fuerzas especiales en territorio enemigo.
Como decimos también podemos disputar una Escaramuza, y hacerlo a través de Internet o contra la IA. El título cuenta, además, con 25 mapas diferentes para estas escaramuzas off y on-line, con lo cual el entretenimiento en este campo también está asegurado. Entre la amplia oferta de escenarios se cuentan lugares tan emblemáticos como Washington D.C., París o incluso La Mancha. Todos ellos retratados con todo lujo de detalles, y con un tamaño muy respetable.
No obstante es Escenario de Guerra el auténtico rey del título, y será aquí donde nos enfrentaremos a rivales de todo el mundo en partidas a través de Internet en un modo que emula hábilmente la gigantesca campaña. Éste se divide en dos partes, la Sala de Situación donde tomamos contacto con la parte por turnos del título, y que es directamente heredera de la del modo individual. Aquí cada turno dura un número de horas concreto, y todos los jugadores acometen diferentes misiones que eligen en un mapa 2D, y que determinan quién posee cada territorio del mundo. Desde aquí se puede acceder también al cuartel, a su menú de objetivos, etcétera. Una vez dentro de cada batalla el título busca un rival y nos enfrenta a él en las modalidades anteriormente descritas y en vertientes de uno contra uno o dos contra dos.
En Escenario de Guerra el primer paso es el de escoger nuestro Batallón. Las posibilidades son Aerotransportado, Mecanizado, Acorazado, Táctico, de Señales y de Asalto. Esta sólo es una guía muy superficial de las clases que encontramos, pues cada una de ellas varía mucho dependiendo de la facción o incluso del número de escuadrón. Cada uno de estos escuadrones tiene sus peculiaridades así, por ejemplo, el Mecanizado nº23 del ejército norteamericano cuenta con infantería pesada con vehículos para desplegarse de forma muy rápida, mientras que el nº26 –también Mecanizado- es algo diferente, con distintos bonus aunque de un corte muy similar.
Mundo Futuro
Ya sabíamos que el apartado gráfico de EndWar no sería especialmente espectacular, aunque es cierto que éste ha mejorado mucho desde que tuvimos oportunidad de verlo en la última feria de la Games Convention.
Se trata de un título interesante en lo visual, que sin grandes alardes logra unos entornos más que aceptables y un modelado de unidades y construcciones muy conseguido. No es su fortaleza principal pues se nota un cierto desequilibrio en las texturas y unos filtros algo pobres, pero el conjunto cumple sobradamente.
Tecnológicamente es cierto que queda lejos gráficamente y también en otros aspectos como la interacción con el entorno o el uso de físicas de lo que se esperaba; sin embargo el fenomenal uso de la detección de voz y lo intuitivo de aportar nuestras instrucciones nos obliga a calificarlo como notable.
Por último hay que destacar que el apartado sonoro es igualmente bueno, con unos efectos de sonido brillantes, unas buenas partituras musicales y un doblaje a nuestro idioma muy adecuado.
Fuente:
http://www.3djuegos.com/juegos/analisis/2479/1/tom-clancys-endwar/
EndWar nace con la intención de convertirse en la primera franquicia seria de estrategia en consolas. Para ello cuenta con numerosos argumentos, entre ellos un revolucionario control por voz, un uso del pad muy cuidado y una campaña on-line de altura. ¿Es suficiente para acercar los RTS a consolas? Descúbrelo con nosotros.
Un RTS en consolas era un concepto que a un estrato importante de los usuarios de videojuegos les parecía poco menos que una blasfemia. Sin embargo lo cierto es que se trata de un género que se ha ido haciendo sitio en la plataforma, como en su momento lo hicieron los shooters, otro estilo de juego aparentemente maldito para el pad.
World in Conflict: Soviet Assault, Halo Wars, Red Alert 3… La lista de títulos de estrategia inminentes para Xbox 360 y PlayStation 3 comienza a ser larga, y todavía lo es más si añadimos los de Nintendo DS, una videoconsola de probado rédito en el género. Sin embargo uno de los lanzamientos por el que más interés sentíamos era EndWar, la nueva entrega de la gigantesca franquicia Tom Clancy.
El título de Ubisoft se hace fuerte donde muchos otros fracasan, y brilla de sobremanera a la hora de proponer un control muy adecuado para dirigir las tropas, que consigue lo que parecía imposible: Hacernos olvidar el ratón. Sin embargo quizá echamos en falta algo más de profundidad en la propuesta, y si bien las posibilidades en cuanto a modos de juego son enormes –especialmente en la vertiente on-line-, también es cierto que a menudo sentiremos que nos falta algo de participación en todo lo que sucede en pantalla.
Poder de Mando
Uno de los mayores aciertos por parte de Ubisoft a la hora de plantear EndWar es, como decimos, el que hace referencia al control, habitual quebradero de cabeza en un título de estas características.
El modelo que ha empleado la compañía gala es similar de alguna manera al del reciente World in Conflict para Pc, tanto en el tratamiento de la cámara como en la selección y transmisión de ordenes a las unidades. Sin embargo logra expandir en diferentes direcciones esta línea, y saca partido de un aspecto tradicionalmente olvidado por los videojuegos en sus modos individuales, el de la voz
Los Headsets de Xbox 360 y PlayStation 3 van a echar humo, pues EndWar nos permite llevar a cabo todos y cada uno de los movimientos de nuestras tropas mediante el control de voz. Podemos emplear las manos únicamente para mover la cámara y obtener el ángulo más adecuado para observar la acción, y hacer todo lo demás sin tocar un solo botón.
Así pulsamos el gatillo derecho y lo dejamos apretado el programa registra nuestra voz, y podemos impartir las órdenes que deseemos. El videojuego logra una precisión espectacular a la hora de recoger nuestras instrucciones en español, y lo consigue tras realizar unos pequeños ajustes antes de comenzar a utilizar el propio título. Con esta fase de “adaptación” se nos explica como emplear el procedimiento, y éste recoge nuestra voz y volumen para serle más fácil utilizarla durante la partida.
El sistema es muy sencillo, y el videojuego registra nuestras frases palabra por palabra componiendo las órdenes, a pesar de que nosotros podemos hablarle fluidamente sin que éste tenga problemas a la hora de recoger las partes que componen nuestro discurso. Así, si decimos con total normalidad “Unidad 5 asegurar Alfa”, el videojuego reconoce las cuatro instrucciones: Unidad, para saber dónde debe centrarse; 5, para conocer cuál de nuestras unidades numeradas deseamos que escoja; Asegurar, para realizar determinada acción; y Alfa, como objetivo de entre los que hay en el mapa.
Así entre las acciones se cuentan las de Atacar, Capturar, Ir A, Retirada, Evacuar o Centrar la Cámara entre otras. Aunque también podemos acceder con la voz a las acciones para llamar a nuevas tropas al campo de batalla, solicitar apoyo de artillería o separar a nuestras tropas por clase para una mejor maniobrabilidad.
La voz es una herramienta fundamental en EndWar, pues permite llevar a cabo las diferentes órdenes a más velocidad que con cualquier otro método. No obstante nada nos priva de la opción de emplear el pad para jugar al título, y no emplear la voz en ningún momento. El videojuego también funciona realmente bien de este modo, aunque se pierde el carácter fresco del título.
El gatillo izquierdo, por último, queda para la creación de grupos pudiendo gestionar de este modo mejor a nuestras unidades. Se aprieta el botón inferior del mando para escoger a las unidades que formarán parte de este atajo, nos desplazamos por el menú inferior de tropas con la cruceta y seleccionamos cuáles deseamos que se incorporen. Todo el equipo se guarda apretando el botón superior. Un sistema sencillo que nos permite elaborar nuestros propios subgrupos, y trabajar con ellos de una forma más ágil y que, de nuevo, se adapta como un guante a las posibilidades del pad.
Acción Táctica
EndWar es un título de estrategia de corte táctico, que obvia toda la vertiente de gestión de recursos de los RTS más clásicos. Se nos planta en un mapa con un puñado de unidades, y debemos apañarnos con ellas para vencer las misiones Sin embargo podemos optar también por ir asegurando puntos de control con los que desbloquear nuevas ranuras, con un máximo de 12 unidades que podremos controlar al mismo tiempo.
Cada una de estas unidades comprende, en realidad, varias en su interior; y es que en EndWar damos las órdenes a escuadrones enteros de, por ejemplo, cuatro helicópteros, dieciséis hombres o cuatro tanques. Las opciones a la hora de trabajar con estos hombres y vehículos no son demasiadas, y quizá sea aquí donde la propuesta del título de Ubisoft encuentra sus mayores problemas.
Apenas podemos desplazarlas, atacar a los enemigos, llevar a cabo sus acciones secundarias –escasas-; y, en el caso de la infantería, entrar en edificios para parapetarnos, cubrirnos tras elementos del escenario o tomar posiciones enemigas o neutrales para sacar partido de éstas.
El título es realmente divertido, y tomar los puntos de control o someter al enemigo es un estímulo muy interesante. Sin embargo puede que a los más aficionados al género les parezca algo limitado en cuanto a posibilidades, precisamente debido a ser algo parco en cuanto a las opciones que nos brinda una vez saltamos al campo de batalla.
La cámara, además, está algo restringida por una decisión conceptual que no hemos acabado de entender. La perspectiva de EndWar está ligada a la de nuestras tropas, y a pesar de que podemos mover la cámara con toda libertad siempre tenemos que hacerlo dentro de unos límites de distancia que impone la situación de nuestras tropas. Podemos saltar de una unidad a otra y fijar la cámara cerca de ellas, pero en ningún momento podemos separarnos a cierta distancia de ninguna y, por ejemplo, explorar el mapa a nuestro gusto.
Esta restricción es una forma de focalizar nuestra atención en un punto del escenario, y de clarificar las posibilidades para los menos duchos en el manejo del pad en un título de estas características. Sin embargo el recurrir a ella por obligación se nos antoja algo exagerado. Es un matiz que recuerda de alguna manera a, por ejemplo, los Total War, que activada determinada opción en sus menús no permitía alejar la cámara de la posición de nuestro general, factor que brindaba mucho realismo a las batallas. Lo que para el título de Ubisoft es una obligación, en el juego de Creative Assembly era una opción que podíamos o no asumir.
Análisis: Tom Clancy's EndWar
5 de noviembre de 2008 / Por Álvaro Castellano Córdova Página 2 de 2
En otro orden de cosas cabe destacar que durante las batallas de la campaña obtendremos créditos que podremos emplear para comprar unidades y mejorarlas entre combate y combate, de hecho el manual incluye un listado muy detallado del coste y características de las tropas de cada facción. Sin embargo será dentro del propio juego donde estaremos siempre limitados por otro factor todavía más importante: Los puntos de mando. Con éstos podremos comprar nuevos efectivos para la batalla en cualquier momento, y contamos con 12 al comenzar que cuando se agoten irán rellenándose progresivamente para facilitarnos la contratación de más elementos para nuestro ejército.
Otro detalle que trata de aportar algo de profundidad al videojuego es el de los Apoyos Externos. Éstos aparecen en la esquina superior izquierda de la pantalla, se activan con el botón superior izquierdo del pad, y suponen elementos determinantes a los que podemos recurrir en momentos concretos de la partida para desequilibrar el conflicto a nuestro lado. Hay algunas sorpresas realmente divertidas en este apartado, pero fundamentalmente todo entra dentro de los clásicos patrones del Ataque Aéreo, Apoyo de Artillería, etcétera. Los diferentes apoyos externos tienen un coste variable en puntos de mando, con lo cual deberemos ser cuidadosos a la hora de usarlos.
Nuevo (Des)Orden Mundial
Dentro de EndWar podemos optar por tres posibilidades bien distintas. La primera es la de hacer frente a la campaña, uno de los puntos fuertes del lanzamiento. Aquí viviremos la Tercera Guerra Mundial desde los ojos de los bandos Ruso, Americano y Europeo; en un modo individual que incluye dos partes bien diferenciadas. Por un lado, y casi a modo de introducción, disputaremos las misiones de Preludio de la Guerra, en los cuales viviremos todas las acciones militares que desembocan en el conflicto armado de escala mundial en el que se convierte la segunda parte y, de hecho, la más larga e interesante.
Los tres bandos que se pueden escoger son los siguientes. En primer lugar encontramos a Estados Unidos con la JSF –Joint Strike Force-, una evolución de los marines. Su capacidad para el sigilo y su tecnología robótica son insuperables, pero donde esta facción brilla es en su conocida capacidad de combate en tierra y aire, destacando por su fuego de precisión y por la velocidad de sus unidades.
Europa brinda a EndWar sus Enforcers, pelotones de élite. Son silenciosos y precisos, y especialmente útiles para la guerra urbana. Disponen de los vehículos más rápidos y emplean armamento de energía a parte de su desmedido potencial para la guerra electrónica.
Rusia, por último, cuenta con la Brigada de Guardia Spetsnaz. Estos hombres son una fuerza letal muy experimentada en el campo de batalla. Destacan por el grueso blindaje de sus unidades móviles y por el uso de armamento pesado.
Las diferentes misiones que acometeremos son de Conquista, Asedio, Asalto e Incursión; y acaban siendo las cuatro modalidades de juego a las que nos enfrentaremos tanto en la campaña individual como en el multijugador a través de Xbox Live o en las escaramuzas. El primero nos propone asegurar más de la mitad de las conexiones de satélite del escenario, aunque también podemos destruir todas las fuerzas enemigas que encontremos. Asedio es algo más simple y nos emplaza a buscar y destruir todo rastro del ejército rival del mapa. Asalto, por su parte, busca que aseguremos la conexión por satélite de la capital de la facción oponente –sólo hay tres, por lo tanto-. E Incursión, por último, tiene como meta llevar a cabo determinadas misiones de fuerzas especiales en territorio enemigo.
Como decimos también podemos disputar una Escaramuza, y hacerlo a través de Internet o contra la IA. El título cuenta, además, con 25 mapas diferentes para estas escaramuzas off y on-line, con lo cual el entretenimiento en este campo también está asegurado. Entre la amplia oferta de escenarios se cuentan lugares tan emblemáticos como Washington D.C., París o incluso La Mancha. Todos ellos retratados con todo lujo de detalles, y con un tamaño muy respetable.
No obstante es Escenario de Guerra el auténtico rey del título, y será aquí donde nos enfrentaremos a rivales de todo el mundo en partidas a través de Internet en un modo que emula hábilmente la gigantesca campaña. Éste se divide en dos partes, la Sala de Situación donde tomamos contacto con la parte por turnos del título, y que es directamente heredera de la del modo individual. Aquí cada turno dura un número de horas concreto, y todos los jugadores acometen diferentes misiones que eligen en un mapa 2D, y que determinan quién posee cada territorio del mundo. Desde aquí se puede acceder también al cuartel, a su menú de objetivos, etcétera. Una vez dentro de cada batalla el título busca un rival y nos enfrenta a él en las modalidades anteriormente descritas y en vertientes de uno contra uno o dos contra dos.
En Escenario de Guerra el primer paso es el de escoger nuestro Batallón. Las posibilidades son Aerotransportado, Mecanizado, Acorazado, Táctico, de Señales y de Asalto. Esta sólo es una guía muy superficial de las clases que encontramos, pues cada una de ellas varía mucho dependiendo de la facción o incluso del número de escuadrón. Cada uno de estos escuadrones tiene sus peculiaridades así, por ejemplo, el Mecanizado nº23 del ejército norteamericano cuenta con infantería pesada con vehículos para desplegarse de forma muy rápida, mientras que el nº26 –también Mecanizado- es algo diferente, con distintos bonus aunque de un corte muy similar.
Mundo Futuro
Ya sabíamos que el apartado gráfico de EndWar no sería especialmente espectacular, aunque es cierto que éste ha mejorado mucho desde que tuvimos oportunidad de verlo en la última feria de la Games Convention.
Se trata de un título interesante en lo visual, que sin grandes alardes logra unos entornos más que aceptables y un modelado de unidades y construcciones muy conseguido. No es su fortaleza principal pues se nota un cierto desequilibrio en las texturas y unos filtros algo pobres, pero el conjunto cumple sobradamente.
Tecnológicamente es cierto que queda lejos gráficamente y también en otros aspectos como la interacción con el entorno o el uso de físicas de lo que se esperaba; sin embargo el fenomenal uso de la detección de voz y lo intuitivo de aportar nuestras instrucciones nos obliga a calificarlo como notable.
Por último hay que destacar que el apartado sonoro es igualmente bueno, con unos efectos de sonido brillantes, unas buenas partituras musicales y un doblaje a nuestro idioma muy adecuado.
Fuente:
http://www.3djuegos.com/juegos/analisis/2479/1/tom-clancys-endwar/
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