- Unido
- enero 6, 2007
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Sonic the Hedgehog
La época dorada del mítico erizo se hace añicos por el afán económicos de unos depravados...
Ha sido el primer juego que he probado para la nueva consola de Sony, PlayStation 3. En el Medimarkt de Gavà (Barcelona) está puesta la consola y ayer reproducía el nuevo juego del erizo azul. Impaciente por tener entre mis manos el noble Sixaxis, me coloqué detrás del chico que jugaba en aquel momento (no había mucha gente) esperando mi turno y el de mi primo, que iba conmigo.
Al coger el mando me sorprendió su peso... ¡Casi medio kilo! Tranquilos, no es el mando en sí, sino un artilugio que le han puesto para que nadie lo pueda robar. De esta forma me quedé sin poder probar el Sixaxis en pleno esplendor: ni su reducido peso, ni los seis ejes de movimiento que tanto polvo han levantado.
Tranquilos, que no me olvido de Sonic... Como olvidar ese timo en forma de disco programado por "intentos de personas humanas".
Jugabilidad:
Pese a la suavidad de los Joysticks analógicos del mando, por poco que lo gires ya es demasiado. Esto se acentúa conforme más velocidad experimentas. Una leve inclinación puede dar al traste con la carrera.
Por otro lado, el número de acciones de que dispone el erizo es casi tan extenso como los que tenía en la Mega Drive. ¡Incluso menos! Para empezar, sólo puedes correr y saltar (X). Mientra estás en el aire puedes pulsar de nuevo la X para realizar dos acciones diferentes. Si hay enemigos cercanos, los atacará (puedes hacer combos); y si no hay ningún enemigo se desplazará veloz por el aire (según el personaje que controles hará una animación diferente, por ejemplo Nuckles planeará durante un tiempo limitado).
Modos de juego:
Dispone de diferentes modos de juego, pero que son meras copias de ediciones anteriores.
-Modo Historia:
Pese a que los escasos minutos que le pude dedicar no me dejaron explorar a fondo (evidentemente) la historia, siempre se ha dicho que el principio ha de ser rotundo e impactante... Sonic lo cumple, pero negativamente.
-Modo batalla:
Pese a que en ediciones anteriores era una de las mejores opciones (todavía recuerdo los míticos piques que tenía con mi hermano), el control impide que puedas competir de manera idónea.
Gráficos:
La saga nunca se ha caracterizado por unos gráficos espectaculares, sobretodo a raíz de su salto a las 3D. Este juego, por desgracia, no ha sido una excepción, de manera que los programadores han optado por colores vivos para evitar una notoriedad mayor de los defector. El gestor de colisiones tampoco es una delicia, convirtiendo algunas pantallas en verdaderas torturas mediáticas. Las texturas de paredes y suelo se hacen monótonas y aburridas, añadiéndosele al nivel de detalle: paupérrimo. Los efetos de los ataques enemigos son muy similares entre ellos y no destacan precisamente por su belleza.
Diversión:
Aunque todo cuanto he comentado del juego parace muy negativo, os puedo asegurar que disfruté del juego... Concretamente cuando dejé de jugarlo para irme de la tienda.
Valoración:
Con juegos como este, más valdría que Sonic disfrutara de un merecido descanso. Su historia no se merecía una mancha como esta, ¿lo sabrá superar?
Sonic se convirtió hace años en un antes y un después de los plataformas consoleros. Hoy lo ha vuelto a conseguir, marcando un límite negativo que si alguien lo supera (hacia abajo) debería retirarse de este mundo en constante crecimiento.
La época dorada del mítico erizo se hace añicos por el afán económicos de unos depravados...
Ha sido el primer juego que he probado para la nueva consola de Sony, PlayStation 3. En el Medimarkt de Gavà (Barcelona) está puesta la consola y ayer reproducía el nuevo juego del erizo azul. Impaciente por tener entre mis manos el noble Sixaxis, me coloqué detrás del chico que jugaba en aquel momento (no había mucha gente) esperando mi turno y el de mi primo, que iba conmigo.
Al coger el mando me sorprendió su peso... ¡Casi medio kilo! Tranquilos, no es el mando en sí, sino un artilugio que le han puesto para que nadie lo pueda robar. De esta forma me quedé sin poder probar el Sixaxis en pleno esplendor: ni su reducido peso, ni los seis ejes de movimiento que tanto polvo han levantado.
Tranquilos, que no me olvido de Sonic... Como olvidar ese timo en forma de disco programado por "intentos de personas humanas".
Jugabilidad:
Pese a la suavidad de los Joysticks analógicos del mando, por poco que lo gires ya es demasiado. Esto se acentúa conforme más velocidad experimentas. Una leve inclinación puede dar al traste con la carrera.
Por otro lado, el número de acciones de que dispone el erizo es casi tan extenso como los que tenía en la Mega Drive. ¡Incluso menos! Para empezar, sólo puedes correr y saltar (X). Mientra estás en el aire puedes pulsar de nuevo la X para realizar dos acciones diferentes. Si hay enemigos cercanos, los atacará (puedes hacer combos); y si no hay ningún enemigo se desplazará veloz por el aire (según el personaje que controles hará una animación diferente, por ejemplo Nuckles planeará durante un tiempo limitado).
Modos de juego:
Dispone de diferentes modos de juego, pero que son meras copias de ediciones anteriores.
-Modo Historia:
Pese a que los escasos minutos que le pude dedicar no me dejaron explorar a fondo (evidentemente) la historia, siempre se ha dicho que el principio ha de ser rotundo e impactante... Sonic lo cumple, pero negativamente.
-Modo batalla:
Pese a que en ediciones anteriores era una de las mejores opciones (todavía recuerdo los míticos piques que tenía con mi hermano), el control impide que puedas competir de manera idónea.
Gráficos:
La saga nunca se ha caracterizado por unos gráficos espectaculares, sobretodo a raíz de su salto a las 3D. Este juego, por desgracia, no ha sido una excepción, de manera que los programadores han optado por colores vivos para evitar una notoriedad mayor de los defector. El gestor de colisiones tampoco es una delicia, convirtiendo algunas pantallas en verdaderas torturas mediáticas. Las texturas de paredes y suelo se hacen monótonas y aburridas, añadiéndosele al nivel de detalle: paupérrimo. Los efetos de los ataques enemigos son muy similares entre ellos y no destacan precisamente por su belleza.
Diversión:
Aunque todo cuanto he comentado del juego parace muy negativo, os puedo asegurar que disfruté del juego... Concretamente cuando dejé de jugarlo para irme de la tienda.
Valoración:
Con juegos como este, más valdría que Sonic disfrutara de un merecido descanso. Su historia no se merecía una mancha como esta, ¿lo sabrá superar?
Sonic se convirtió hace años en un antes y un después de los plataformas consoleros. Hoy lo ha vuelto a conseguir, marcando un límite negativo que si alguien lo supera (hacia abajo) debería retirarse de este mundo en constante crecimiento.
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