"Vamos a matar y violar a las mujeres y los niños de la calle Mayor". Cuando los vecinos del número 40 de la susodicha vía recibieron esta carta en su buzón hace una semana, pensaron que se trataba una broma... pero ayer un cartel puesto en la entrada recordaba cerrar el portal. "Será una broma, pero por si acaso", dice uno de los residentes (oculta su identidad por miedo).
La misiva, sellada a finales de agosto, está escrita a mano y en mayúsculas, y se dirige a todos los vecinos desde el número 2 al 40 de la calle Mayor (Centro).
El miedo se palpa en algunos de los residentes, aunque otros, como la anciana portera de un hostal, parece sorprendida al conocer la noticia: "Yo no sé nada de esas cosas, apenas salgo a la calle", dice.
Sin embargo, la portera del número 38 afirma, algo inquieta mientras juega al mus, que hace un mes recibió una visita de unos policías de paisano preguntando por "mensajes con amenazas".
La carta tiene además otras cosas sorprendentes. El autor ha puesto como remitente a una conocida institución madrileña y, como ‘firmantes' utiliza el nombre de ex ministros y de militares de EE UU. Algunos de los vecinos ya se han puesto en contacto entre ellos para denunciar conjuntamente ante la Policía.
Durante estos días la carta ha sido la comidilla del barrio, y ya hay teorías sobre quiénes pueden ser sus autores: bromas de mal gusto, un macabro juego de rol... algunos mayores dicen que lo que quieren es echarles de sus rentas antiguas "para enriquecerse".
Una broma de mal gusto
La carta parece una broma de mal gusto, pero al que la ha hecho puede costarle caro. Según el artículo 169 del Código Penal, las amenazas se penan con hasta seis años de cárcel. Además, se avisa que las penas se impondrán "en su mitad superior si las amenazas se hicieren por escrito, por teléfono o por cualquier medio de comunicación o de reproducción, o en nombre de entidades o grupos reales o supuestos". La Policía Nacional, ante estos casos, aconseja siempre denunciar.
