En Holanda pueden navegar por Internet 120 veces más rápido que en España. El operador de cable UPC acaba de probar un nuevo sistema de acceso en un barrio de Amsterdam. Una nueva tecnología de cable coaxial, llamada EuroDocis 3.0 y desarrollada con Cisco Systems, que consigue una velocidad de 120 megabits por segundo de bajada.
La banda ancha holandesa acaba de apuntarse otro tanto con este sistema, que en futuras pruebas podría superar fácilmente velocidades de hasta 200 Mbps. Y lo mejor es que no habría que volver a instalar toda una nueva red de cables. Bastaría con retocar los tramos de cada barrio o zona.
El sistema todavía está en fase preliminar y al alcance de unos pocos habitantes. Aún así, la comparación entre la Internet de alta velocidad de España y Holanda es de vergüenza. Aquí pagamos casi 50 euros por 1 mega de velocidad, mientras que la propia UPC ofrece 24 de bajada y 2 de subida por 60 euros (sin IVA) en el país de los tulipanes.
Y no es la mejor oferta, ni mucho menos. Otro operador, XMS, alcanza velocidades más altas con una tecnología distinta, llamada FTTH, que consiste en llevar cables de fibra óptica hasta el domicilio del cliente. Y son velocidades simétricas. Que esa es otra. En España la famosa oferta de “hasta 20 megas” no llega ni a la mitad de lo prometido en bajada. Pero es que en subida apenas se alcanzan los 512 Kbps (es decir, medio mega).
La oferta de XMS, que sólo está disponible en algunas ciudades holandesas, alcanza 24/24 megas (33 euros mensuales), 48/48 (70 euros mensuales) y 100/100 megas (93 euros mensuales). Es como comparar el coche de Fernando Alonso con un Seat 600, con la salvedad de que no hay una diferencia de precios desorbitada.
Y todavía algunos dirán que la banda ancha española es comparable a la de cualquier país europeo. Cuando, en realidad, estamos a la cola en todos los rankings de acceso a Internet y la Unión Europea piensa que lo que hace Teléfonica, curiosamente una de las operadoras más rentables de todo el continente, es un abuso.
Vía: adslzone
La banda ancha holandesa acaba de apuntarse otro tanto con este sistema, que en futuras pruebas podría superar fácilmente velocidades de hasta 200 Mbps. Y lo mejor es que no habría que volver a instalar toda una nueva red de cables. Bastaría con retocar los tramos de cada barrio o zona.
El sistema todavía está en fase preliminar y al alcance de unos pocos habitantes. Aún así, la comparación entre la Internet de alta velocidad de España y Holanda es de vergüenza. Aquí pagamos casi 50 euros por 1 mega de velocidad, mientras que la propia UPC ofrece 24 de bajada y 2 de subida por 60 euros (sin IVA) en el país de los tulipanes.
Y no es la mejor oferta, ni mucho menos. Otro operador, XMS, alcanza velocidades más altas con una tecnología distinta, llamada FTTH, que consiste en llevar cables de fibra óptica hasta el domicilio del cliente. Y son velocidades simétricas. Que esa es otra. En España la famosa oferta de “hasta 20 megas” no llega ni a la mitad de lo prometido en bajada. Pero es que en subida apenas se alcanzan los 512 Kbps (es decir, medio mega).
La oferta de XMS, que sólo está disponible en algunas ciudades holandesas, alcanza 24/24 megas (33 euros mensuales), 48/48 (70 euros mensuales) y 100/100 megas (93 euros mensuales). Es como comparar el coche de Fernando Alonso con un Seat 600, con la salvedad de que no hay una diferencia de precios desorbitada.
Y todavía algunos dirán que la banda ancha española es comparable a la de cualquier país europeo. Cuando, en realidad, estamos a la cola en todos los rankings de acceso a Internet y la Unión Europea piensa que lo que hace Teléfonica, curiosamente una de las operadoras más rentables de todo el continente, es un abuso.
Vía: adslzone
