1. Objetos inútiles: De este tipo hay millones de ejemplos. Objetos cotidianos que no pretenden ser nada más que eso. Algo de lo que alguien se quiere deshacer y cualquiera que desee tirar el dinero, puede comprar. Un calcetín sin pareja, un avión de papel, la uña de un pie, o un clip doblado...
Este sitio utiliza cookies para ayudar a personalizar el contenido, adaptar su experiencia y mantenerlo conectado si se registra.
Al continuar usando este sitio, usted acepta nuestro uso de cookies.