El condensador de fluzo: Resident Evil 2

Terror absoluto en uno de los mejores títulos de PSX

Hablar de Resident Evil es hacerlo de una de las sagas más importantes, duraderas y extensas de la historia de los videojuegos. Iniciada en el año 1996, los problemas que generó el Viru-T aún se extienden a nuestros días con los más recientes Residente Evil 6 y Resident Evil Revelations. Pero si hay una entrega que perdura en nuestra memoria y que supuso uno de esos puntos de inflexión en el desarrollo de la industria fue Resident Evil 2.

Resident Evil 2 apareció para PSX allá por el año 1998 de la mano de la compañía Capcom y se encuadraba dentro del género del survival horror. Posteriormente se hicieron versiones para PC, Game.com, Nintendo 64, Dreamcast y Nintendo Game Cube.

Resident Evil 2 nos situaba en Raccoon City dos meses después de los acontecimientos ocurridos en la mansión Spencer y relatados en la primera parte. El Virus-T ha sido liberado en el sistema de alcantarillas y propagado por las ratas, por lo que la ciudad entera ha sido invadida por los zombies. Resident Evil 2 nos permitía controlar a dos personajes, cada uno con su propio CD: Leon S. Kennedy, un policía en su primer día de trabajo, y Claire, una estudiante en busca de su hermano, Chris Redfield, el protagonista de la primera entrega. Cada uno de ellos intentará sobrevivir en una ciudad repleta de muertos vivientes al tiempo que va descubriendo las consecuencias de los macabros experimentos de la empresa Umbrella.

Al poco de adentrarnos en el juego, descubríamos dos novedades importantes. Por un lado, cada personaje contaba con dos escenarios y era jugando con el otro personaje como desbloquearemos ese segundo escenario de cada uno, lo que otorgaba un gran rejugabilidad al título y la posibilidad de ver distintos finales en el juego. Por otro lado, se introducía un sistema de rankings, que nos otorgaba un rango (con las consiguientes recompensas) dependiendo de cómo lo habíamos hecho durante cada nivel.

La mecánica del juego alternaba los momentos de acción con puzzles más o menos complejos, todo ello envuelto en una atmósfera opresiva. Debíamos enfrentarnos a oleadas de zombies y seres mutantes utilizando un amplio arsenal personalizable (pistolas, escopetas, ballestas…), pero teniendo cuidado de no malgastar la escasa munición. Los puzzles se hacían algo repetitivos, ya que básicamente consistían en encontrar tal objeto y colocarlo en tal ranura, pero daban mayor variedad al desarrollo.

Destacar que nuestro protagonista “se resentía” por los ataques que iba recibiendo, resultándole cada vez más difícil caminar, y que aquellos ciudadanos que encontrábamos en nuestro camino y que eran atacados por los zombies resucitaban para convertirse a su vez en muertos vivientes que nos atacaban. Todo ello dentro de una curva de dificultad bien ajustada en cualquiera de los dos niveles disponibles: fácil y normal. Además, era posible desbloquear un modo survivor en el que contábamos con dos personajes nuevos: Hunk y Tofu.

A nivel gráfico, Resident Evil 2 mejoraba a su predecesor. Nos encontrábamos con una combinación de fondos pre-renderizados y personajes y enemigos en 3D que lucía a gran nivel y que sólo presentaba claros fallos en la cámara, que en ocasiones no mostraba el ángulo más adecuado. Los personajes eran más realistas y estilizados y los escenarios más amplios y con un diseño más detallado. Destacaban especialmente las impresionantes secuencias de animación (FMV), con alguna que ya ha pasado a la historia de los videojuegos, así como el aumento del número de enemigos en pantalla.

La banda sonora cumplía correctamente y lograba crear esa sensación de inquietud que nos acompañaba durante todo el juego. Los efectos de sonido nos mantenían en constante tensión, esperando la aparición del enemigo en cualquier momento. El título llego a nuestro país con voces en inglés y subtítulos en castellano.

Resident Evil 2 fue y será por siempre un referente de los survival horror, un título que marcó un antes y un después y que se ha ganado por derecho propio un puesto de honor en la historia de los videojuegos. Considerado por muchos como el mejor Resident Evil de la saga, no son pocas las voces que reclaman una vuelta de la saga a los orígenes, al auténtico survival horror. Habrá que esperar a las seguras entregas que se producirán en la nueva generación para ver si esto es así.