Análisis Pro Evolution Soccer 2017

86
Konami acecha a EA Sports reeditando las virtudes que hicieron grande a la saga PES
Por Manuel Gimeno 17 septiembre, 2016

Este análisis no lo voy a empezar repitiendo la más que agotada frase de que “este año PES ha vuelto”. Pro Evolution Soccer ya volvió el año pasado en todo su esplendor, con lo que a los viejos fantasmas del pasado no vale la pena mentarlos porque ya no pertenecen a la realidad de esta franquicia. Pro Evolution Soccer 2017 no tiene ya que sonrojarse ante las virtudes que también tendrá FIFA 17, pues bajo su propio estilo, el de los mejores años, vuelve a poner encima de la mesa una alternativa más que interesante para todos aquellos que aman el fútbol con fervor absoluto.

Esa es justo la razón que hace que haya vuelto la confianza a la franquicia, la decisión de Konami de no tocar (por fin) lo que se ha demostrado que funciona y lo que desde luego gusta a los fans acérrimos de la saga; esos fieles que no han perdido la fe y que añorando los buenos momentos de PES 5 y, sobre todo, PES 6, han esperado pacientemente a poder tocar y sentir en sus propias manos las mismas sensaciones. La enhorabuena les doy a todos ellos pues una nueva época es la que estamos viviendo ahora mismo en la que por fin cada juego evoluciona desde una base sólida, con sentido y fundamentalmente divertida.

https://youtu.be/eIhbkrdsDKU

Porque Pro Evolution Soccer 2017 es básicamente evolución pura y dura del de la pasada entrega, sin florituras y tampoco sin riesgos, porque no toca correrlos ahora. La sensación que uno tiene cuando se pone disputar cualquier partido no es demasiado diferente a la que se podía apreciar cuando se jugaba a PES 5 o PES 6 en PlayStation 2. Como mucho, la certeza de que estamos en una época distinta, que han pasado dos generaciones y media y de que las animaciones, las físicas y el control se corresponden a los tiempos que corren ahora. Todo lo que podría empezar con lo que Konami denomina en esta entrega como “Real Touch”, que no es ni más ni menos que ese gran primer toque a la hora de recibir el balón y la sensación de que cada movimiento se corresponde con lo que haría el jugador que se está manejando. Plasticidad y suavidad en las físicas y en las animaciones que provocan que cada encuentro y cada pelota dividida sea impredecible, y que logra renovar esa sensación de sorpresa que no debería perder ningún juego deportivo.

Este asunto y la mejora de los pases con el denominado «Precise Pass» son los dos pilares de la jugabilidad de PES 2017, justo lo que logra que el juego tenga la virtud de ser fácil y sencillo de jugar. La suavidad de movimientos, la precisión de los mismos y la manera en la que se construyen las jugadas hacen de Pro Evolution Soccer 2017 un videojuego que no le pide al jugador filigranas complicadas para zafarse del rival, sino que con simples recortes, cambios de dirección y pases precisos se puede llegar a crear efectivas ocasiones de gol. Hacer paredes, centrar o realizar pases al hueco rasos o por alto provocan una satisfacción increíble, sobre todo porque los desmarques tienen sentido, y la física de balón y la ejecución del movimiento favorecen situaciones realistas. Tal vez incluso esos pases al hueco por arriba funcionan demasiado bien, siendo un problema que no se ha resuelto con respecto al año pasado.

Es en el chut a puerta donde uno se hace a la idea de lo realista que continúa siendo la física de balón. Parece que es algo que no cambia con el paso de los años, y es que Konami ha sabido darle más peso al esférico que EA Sports durante todos estos años. Los disparos secos, los tiros colocados con el interior de la bota, las vaselinas incluso… Es una delicia el encarar a puerta y saber que tus armas van a tener el efecto que esperas, ni más ni menos. Y ahora, además, por fin habrá delante un guardameta competente que no cantara la traviata como en años anteriores. Tal vez sea una de las mejoras más obvias a simple vista, y es que, aunque con margen de mejora, por fin los porteros son algo más que simples muñecos colocados en medio de la portería.

Y como decía antes, las animaciones y las físicas favorecen que PES 2017 sea un juego de fútbol en el que el contacto supone una herramienta fundamental, tal y como lo es en el fútbol real. El cuerpo a cuerpo tiene su importancia para aguantar la pelota porque funciona mejor la mecánica que el año pasado, y luego todo esto tiene su incidencia positiva tanto en ataque como en defensa. Los regates, tan naturales como había comentado antes, se ven afectados con convicción cuando el jugador sale trastabillado de un recorte. En la defensa, por otro lado, existen las posibilidades de siempre para robarle la pelota al rival, teniendo un sistema de presión que funciona correctamente tanto para ejercerla de manera individual como colectiva.

Todo esto queda reforzado con las herramientas estratégicas que Konami ofrece para desplegar el fútbol que se quiera en cada partido, pero sobre todo las que puedes activar en el transcurso del mismo. Funcionan realmente bien ciertas acciones, como adelantar la línea defensiva para aumentar la presión sobre el rival o pegar a los laterales a la línea de cal para ensanchar el campo. PES 2017 es en este sentido un juego que hará las delicias de los jugadores y jugadoras más tácticos, apuntalando también una faceta realista que se combina muy bien con el ligero toque arcade que siempre se ha dejado ver en la jugabilidad.

En su conjunto, la interacción, el fútbol que podamos desplegar desde el DualShock 4, no difiere demasiado con el del año pasado. Sí mejoran ciertas cosas aquí y ciertas cosas allá, como los porteros o incluso una inteligencia artificial que aprende de nuestros movimientos para enfrentarse con más posibilidades contra nosotros. Pero Konami ha optado por aquello del “si funciona, no lo toques” para pulir todo lo bueno que hicieron el año anterior y poner una baldosa más en el camino de esta generación.

Y si han sido conservadores este año en la jugabilidad, todavía lo han sido más en los modos de juego. Mientras que FIFA 17 lucirá este año un flamante modo historia al más puro estilo NBA 2K, PES 2017 apuesta por lo mismo para exprimir todo su fútbol durante un año entero. No es que fuera poco lo que ya había, pero hubiera sido genial tener otro aliciente más donde pasar horas y horas durante todos estos meses. Es por ello que esta nueva entrega se apoya de nuevo en los tres pilares básicos de la franquicia: La Liga Master, MyClub y Ser una Leyenda.

Qué decir a estas alturas de la Liga Liga Master, un modo que lleva muchísimos años siendo uno de los alicientes principales de cada nuevo juego de la saga. Este año se han decidido a mejorar ciertos problemas del año pasado, como fue todo lo relacionado con el sistema de traspasos. Ahora se ha separado el presupuesto para realizar el fichaje y para pagar el sueldo del jugador, y se ofrece mayor variedad para llevar a cabo negociaciones como las cesiones y la posibilidad de comprar un jugador en uno de estos periodos. También se han ampliado los roles de equipo de forma sustancial para que uno pueda dejar su propio sello en el conjunto, así como se ha introducido la posibilidad de que los jugadores adquieran habilidades con el paso de los años o incluso mientras están en periodos de cesión en otro equipo.

Ser una Leyenda parece este año el gran olvidado por Konami, y mantiene casi la misma estructura que en el año anterior, algo que no ocurre tan exageradamente en MyClub, que cada año tiene más importancia en la saga PES. En esta entrega se ha dado más peso a los ojeadores, que están ahora en la casa de subastas, y además se ofrece la posibilidad de ver un análisis en detalle de la estrategia y la forma de jugar del rival contra el que uno vaya a competir. Lo bueno es que todo esto y mucho más está explicado en tutoriales repartidos por todo el modo, y que ayudan al jugador a aclararse entre novedades y herramientas habituales.

Más allá de los modos estrella, uno se encuentra la UEFA Champions League, la UEFA Europa League y la AFC Champions League como torneos licenciados; este último como parche total a la ausencia de la Copa Libertadores y de la Copa Sudamericana. Las opciones se extienden en el terreno online con el Campeonato en Línea, Divisiones en Línea, Vestíbulo de Partidos Amistosos y Vestíbulo de Juego en Equipo, funcionando correctamente la conexión la gran mayoría de veces, y siendo esta comprobación motivo por el cual nuestro análisis ha salido algo más tarde de lo normal.

Y aquí piso terreno pantanoso, justo en la carencia histórica de la franquicia. Aunque como juego de fútbol PES 2017 tiene personalidad propia y ofrece una experiencia divertida e interesante, es preocupante cómo Konami descuida algo tan importante como las licencias en cada entrega. Ya no vale el argumento que se esgrimía (yo mismo, como fan de la saga en aquel entonces) de que poco importan las licencias si la propuesta de fútbol es buena. FIFA lleva años tomando la delantera a PES en casi todo, y aunque Konami haya recortado mucho la distancia en jugabilidad (hasta casi igualarla, eso sí, ofreciendo algo distinto), todavía sigue muy lejos en este tema. El fútbol es pasión y sentimiento, y todo el mundo quiere poder jugar con su propio equipo o contra el eterno rival. En PES 2017, aunque seas del Barça y veas en esta entrega casi un producto oficial del club, no podrás enfrentarte al Real Madrid en su campo o con su propio escudo y equipación, algo dramático incluso en los tiempos que corren. Sí, está claro que puedes editar las equipaciones o incluso cargarlas en tu consola descargando algún archivo que un buen samaritano se haya currado altruistamente, pero no es lo mismo ni de lejos que tener casi todo con las licencias oficiales.

Así pues PES 2017 tiene, además de la UEFA Champions League, la UEFA Europa League y la AFC Champions League, acuerdos de colaboración con el FC Barcelona, Liverpool FC, Borussia de Dortmund, Club Atlético River Plate y la Confederación Brasileña de Fútbol, con equipos como el SC Corinthians Paulista, CR Flamengo o Red Bull Brasil. También está al completo la Liga Italiana, la Ligue 1 francesa, la Eredivisie holandesa y la Liga de Argentina y Chile, y luego equipos suelos en ligas sin licenciar como el Arsenal FC, el Atlético de Madrid, SL Benfica o Sporting CP, entre otros.

También en el apartado técnico PES 2017 mejora sin demasiados alardes con respecto al año anterior. Las caras, sobre todo, son lo más llamativo de la franquicia desde hace un tiempo, ya que seguramente sean más reales que las que ofrece FIFA, incluso para la edición de este año. PES estará lejos a nivel de músculo de lo que muestra EA Sports con el Frostbite, pero inexplicablemente saben hacer mejor las caras, así de simple. Sobre todo esto se aprecia en equipos licenciados como el Barça o el Liverpool, donde se calca casi al máximo el rostro de cada jugador. Luego, claro está, los equipos menos conocidos reciben jugadores mucho menos trabajados, tan poco incluso que el resultado es algo grotesco. Los estadios, la gente y la atmósfera en general también luce bien, aunque pondría un pequeño “pero” en los efectos meteorológicos y lo poco que impactan cuando aparecen.

En los comentarios un año más encontramos a Carlos Martínez narrando el encuentro y a Maldini dando pinceladas de sabiduría de cada jugador. Mismos problemas que todos los años: falta de variedad en las frases y armonía a la hora de enlazar una detrás de otra, o simplemente palabras sueltas. La banda sonora al menos recupera la fuerza de antaño, y aunque tu gusto musical no se corresponda no podrás quitarte de la cabeza algunos temas, como ocurre con “Where are Ü now”.

Después de la gran evolución que se produjo el año pasado, PES 2017 es la consecuencia directa del conservadurismo de aquel que sabe que anda por el buen camino. Las pocas mejoras dan estabilidad y fortaleza a lo que es ahora Pro Evolution Soccer, pero la franquicia debe mejorar aspectos más allá de la jugabilidad para no descolgarse de la carrera con FIFA el año que viene. Innovaciones en los modos de juego y un mayor esfuerzo en las licencias serían un buen segundo paso para hacer de nuevo a la saga de Konami tan grande como lo fuera antaño.

86
Jugabilidad: 8.5
Gráficos: 8.75
Sonido: 8.75
Satisfacción: 8.5

Análisis

Konami no arriesga y mejora levemente PES 2017 con respecto a la entrega pasada para hacer de éste un juego mejor. Es muy divertido el fútbol que propone la franquicia, muy similar al visto en PES 5 y PES 6. El único problema viene de la mano de las pocas innovaciones en los modos de juego y de licencias escasas que no son suficientes para convertir a Pro Evolution Soccer 2017 en el juego de fútbol definitivo para este año.