Análisis Sword Art Online: Lost Song (PS4)

73
Diversión dinámica y de mucha altura
Por J.D. Hernandez 26 noviembre, 2015

Fenómeno creciente es sin duda el relacionado con Sword Art Online en Occidente. Bandai Namco, conocedora de los movimientos que se producen a este lado del mundo y muy pendiente últimamente de satisfacer las necesidades de todo el público, no para de traer juegos relacionados con la famosa saga. Primero fue Hollow Fragment tanto en su versión para PS Vita como su revisión y mejora para PlayStation 4, y ahora le toca el turno a Lost Song, la continuación directa de este último.

Antes de que continuéis leyendo es nuestra responsabilidad moral indicar que el siguiente párrafo contiene spoilers del primer juego, por lo que os aconsejo saltarlo si tenéis pensado jugar a Hollow Fragment como mínimo.

Después de conseguir terminar el piso 100 de Sword Art Online y por consiguiente dar por concluido el dichoso juego, Kirito y los demás supervivientes vuelven al mundo real, a salvo, aunque ahora les espera una dura y dolorosa rehabilitación por los dos años que han pasado postrados en una cama. Durante ese tiempo ha aparecido un nuevo juego que utiliza el sistema de realidad virtual de SAO y nuestros protagonistas no se resistirán a probar esta nueva aventura.

Nada más comenzar nos encontramos con muchas y buenas diferencias respecto a la primera entrega, sobre todo en lo relativo a la forma de juegar, pues estamos ante un RPG que mira mucho más a la acción, teniendo su incidencia directa en los controles del DualShock 4. Algo que no pasaba con Hollow Fragment, donde la mayoría de las veces el personaje atacaba automáticamente hasta que vencía al rival. Los combates han evolucionado de manera dinámica haciendo que incluso podamos pasarlo mal en algún momento al vernos rodeados de enemigos.

No nos alejaremos mucho de los combates para comentaros otra de las novedades que nos ha encantado, y es que ahora podemos volar. Pero no simplemente volar de un sitio a otro como medio de transporte más rápido que el ir andando por tierra, sino que Lost Song también tiene combates aéreos. Cuesta un poco dominarlos, pero con el tiempo es fácil acostumbrarse a un manejo que no difiere al final tanto con el control ordinario, pero que aporta frescura al plano interactivo. Por supuesto el vuelo no se limitará solo a esto, ya que hay diferentes islas flotantes que ocultan objetos de mejora o incluso mazmorras.

La cantidad y variedad de enemigos es otra de las novedades. Lógicamente son diferentes a lo visto anteriormente, pero el número de ellos que hay en pantalla sobretodo en campo abierto es impresionante. Además seregeneran cada poco tiempo, haciendo que pasemos horas y horas en una zona exterminando bestias sin fin. Si tenemos en cuenta que se intenta recrear un MMORPG, algo imprescindible es la regeneración automática de enemigos cada poco tiempo, y ahora al hacerse en Lost Song sí tenemos más sensación de estar metido en uno.

En cuanto a su vertiente online es donde encontramos una gran pega, por las escasas opciones de personalización que hay de nuestro avatar. Tenemos todas las razas del juego a nuestra disposición, pero éstas vienen limitadas en género, por lo que si quieres un raza especifica solo te queda aguantarte con el género que le corresponde, quieras o no. Junto a este hecho además tenemos solo la posibilidad de elegir entre dos peinados, dos caras o dos tonos de piel, por lo que se acaba usando más en el online a alguno de los protagonistas que al propio avatar. En cuanto a lo que podemos hacer online, nos limitaremos a dos modos, el jugador contra jugador y a cumplir misiones de acabar con un monstruo en concreto.

Queremos acabar de comentar las novedades con algo que también fue muy criticado en Hollow Fragment y que han puesto también solución ahora. Como os comentamos en su respectivo análisis y habréis visto si lo jugasteis, únicamente podíamos controlar a Kirito, pero ahora podremos manejar por fin a cualquiera de su grupo.

El resto de opciones se han mantenido, podremos comprar objetos, comprar y mejorar armas… en este sentido no vemos mucha evolución, aunque viene con algunos DLCS de trajes que si os gusta el tema del fanservice harán vuestras delicias llevando a las chicas con un bañador o únicamente con una toalla enrollada al cuerpo.
Ya os decimos que si queréis sacaros el platino y exprimir todo lo que Sword Art Online: Lost Song tiene os vais a tirar muchas horas frente a la pantalla tanto en PSVita como en PlayStation 4.

Todos los que jugamos a juegos de tipo anime, sabemos de sobra qué tipo de apartado gráfico nos vamos a encontrar en ellos y afortunada o lamentablemente, depende de cómo se mire, este Lost Song no va a ser una novedad al respecto.

Una vez más nos encontramos con un apartado grafico que tira más hacia la animación de los personajes (cosa que es obvia) haciendo especial hincapié en los protagonistas y dejando a los enemigos en ocasiones al mismo diseño de monstruo pero con un nuevo color. Cierto es que cuando vemos el espacio que ocupa en nuestras consolas podemos entender el motivo de ello. Además también sale en PlayStation Vita y eso puede limitar en parte ciertos aspectos, pero seguimos sin entender el motivo que hace que los usuarios de la consola de sobremesa y con una más que clara mayor potencia y prestaciones se ve lastrada por su hermana menor.

Otra de las cosas que parece acusar el port de portátil a la de sobremesa serían los escenarios, bien definidos pero falta mucho para que podamos considerarlos siquiera del actual momento de PlayStation 4. A veces nos encontramos con escenarios planos que se salvan precisamente por la cantidad de enemigos en pantalla, algún que otro elemento como torrentes de viento y por las diferentes islas a las que podemos volar. Así mismos las mazmorras son muy iguales en diseño, algo que en las próximas entregas el estudio debería de poner un poquito más de esfuerzo en ofrecernos variedad o que la plataforma base para el desarrollo sea PlayStation 4.

Algo que sufrimos en la anterior entrega fueron unas caídas de frames ocasionadas por la cantidad de personajes que había en la pantalla, y que experimentábamos en las ciudades cuando aparecían 20 o 30 personajes por una puerta. Ahora se ha evitado esto y tenemos un juego que no sufre caídas en la tasa de imágenes por segundo, manteniéndose estable durante toda la aventura…

En cuanto a sonido, una vez más tenemos una selección musical muy acorde con la temática y genero. Lógicamente no nos vamos a encontrar con temazos presentes en juegos RPG de 1997 que marcaron toda una época, pero cumplen con creces en el campo de batalla o en el bar donde tenemos una música más relajada que incluso invita a echarse un sueñecito. Todo esto viene aderezado con el magnífico doblaje original en japonés y con unos fantásticos subtítulos en castellano. Sword Art Online por fin viene traducido a nuestro idioma en esta entrega.

Sword Art Online: Lost Song trae las suficientes novedades como para dejar a su predecesor casi en pañales. Un sistema de vuelo en el que puedes combatir, regeneración automática de enemigos, zonas flotantes, poder usar personajes mas allá de Kirito… Sí, es cierto que hemos visto su mayor problema en tema de escenarios que podemos achacar a un supuesto lastre de la versión de portátil, pero a pesar de ello su frame rate es estable y, sobre todo, cuanta con batallas divertidas y dinámicas.

Hay que tener que este título es una continuación y contiene datos de la trama del juego anterior. Si alguna tienda sigue teniendo la promoción de dar el primer juego por la compra de este, deberíais darle una oportunidad aunque sea rápida. Si por el contrario venís de nuevas y no os importa en absoluto el primer juego, Lost Song ofrece un pequeño resumen que coloca algo en situación.

73
Jugabilidad: 7.5
Gráficos: 7.25
Sonido: 7
Satisfacción: 7.5

Análisis

Sword Art Online regresa a PlayStation con un juego lleno de novedades tan importantes como los combates aéreos. Flojea un poco en cuestión de gráficos, posiblemente lastrado por la versión de PlayStation Vita, pero mejorando el frame respecto a Hollow Fragment. Voces en Japonés con subtítulos por primera vez en castellano.