Análisis Oreshika: Tainted Bloodlines

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Intenta romper a contrarreloj la maldición de tu familia
Por J.D. Hernandez 11 marzo, 2015

Tras unos inicios algo pobres para su catálogo, PlayStation Vita está nutriéndose de títulos que dotan de calidad al conjunto de títulos disponibles. Ahora nos ponemos a los mandos de un título que ofrece una propuesta interesante y, aunque no es un must have en toda regla, sí que es un juego muy a tener en cuenta tanto por su historia como por sus diferentes opciones.

De la mano de Sony y Japan Studio nos llega a Europa Oreshika: Tainted Bloodlines en formato digital, siendo la continuación del título aparecido hace unos años en PSP y que ahora da el salto a la nueva generación de consolas portátiles de la compañía japonesa.

Somos la cabeza de una familia que ha sido castigada al considerar que no ha cumplido con su deber cuando robaron cuatro objetos sagrados. Por ello, toda la familia, incluido mujeres y niños, es pasada por la espada sin compasión alguna. Después de dejar todas las cabezas de nuestra familia en fila india, un Dios baja a la tierra para proponernos un trato: volver a la vida pero con dos condiciones. La primera de ellas es que viviremos un máximo de dos años y seremos completamente estériles salvo en dos supuestos o bien teniendo descendencia con miembros de otras familias con una maldición similar o bien con dioses, a pesar de esto último nuestra descendencia también tendrá la maldición y tendrá dos años para intentar salvar a la familia y asegurarse una descendencia que mantenga el legado.

Lo primero que tendremos que hacer es crear a nuestro personaje y darle nombre. Podremos elegir su género y tendremos la posibilidad de usar la cámara para crear un personaje similar a nosotros, aunque siempre podremos hacerlo a nuestro gusto. Después de crear lo básico del personaje tendremos que elegir una profesión para nuestro protagonista y sus tres hermanos, existiendo varias opciones entre las que elegir, como guerrero, arquero, lancero… cada uno con sus características independientes y que también podremos elegir en nuestra descendencia.

La verdad es que Oreshika: Tainted Bloodlines es un juego que tiene un sistema de lucha muy sencillo, no nos costará nada ajustarnos a él ya que solo tendremos tres opciones por turno que irá desde atacar a ciertos enemigos y defendernos o usar alguna característica, además tendremos la opción de usar diferentes skills que hayamos desarrollado previamente como el curar a un miembro o a todo el grupo de hasta cuatro. Al finalizar los combates, que podremos finiquitar rápidamente si nos centramos únicamente en el jefe del grupo, se nos otorgará la clásica experiencia, los objetos que hayamos sacado en la ruleta que tenemos al principio y otro elemento llamado devoción que es muy importante y que os comentaremos más adelante.

Otra de las cosas que podremos realizar como jefes del clan es desarrollar nuestra ciudad para dotarla de mejores instalaciones que harán que consigamos mejores objetos en ella y que se amplíe. En principio parece un apartado que no sea muy importante pero es interesante que os paréis a desarrollarla siempre que podáis para que vuestra tarea sea algo más sencilla de llevar a cabo.

Cuando salgamos a partirnos la cara con los diferentes demonios que hay por el juego tendremos que elegir una zona del mapa. Cuando estemos en la zona seleccionada podremos movernos más libremente, aunque encontramos escenarios es bastante pasilleros llenos de demonios y cofres que abrir, todo esto aderezado con ciertas barreras que no podremos pasar a no ser que tengamos ciertas llaves o también ciertos eventos que accederemos en determinados meses del año. Aunque podremos irnos a casa en todo momento, cada mes que pase en el “laberinto” tendremos la opción de seguir en él o volver a nuestra casa principal, todo es cuestión de estudiar la mejor opción en cada momento.

Ahora os pasamos a comentar el apartado de “Rito” que es una de las partes fundamentales del juego ya que aquí es donde podremos hacer que tengamos descendencia. Como os hemos puesto más arribasóloo podremos tenerla con dioses o con otros clanes malditos, y aquí es donde entra en juego la devoción que hemos ganado con cada combate y es que será necesario para poder acceder a ciertos dioses que tienen mejores estadísticas y que hará que la descendencia tenga más posibilidades de llegar más lejos que sus ancestros. Recordad que tenéis hasta 24 meses de vida por lo que os aconsejamos que lo hagáis en torno al mes 14 para no pillaros los dedos y conseguir una cantidad de devoción aceptable.

Como hemos visto en las líneas anteriores lo que hay que hacer en Oreshika: Tainted Bloodlines es de fácil resumen, lo mismo podemos hacer con su apartado gráfico. Nos encontramos ante un juego con unos escenarios variados que van desde cuevas de cristal o una casa llena de gatos con cuencos gigantes, aunque vemos unos personajes poco variados, siendo los enemigos la cuestión más representativa.

Lo verdaderamente interesante en el apartado gráfico viene en el diseño de los personajes, tanto principales como enemigos, ya que están representados de tal forma que parecen ilustraciones japonesas antiguas, algo que le da un toque genial al título y que hace que alguna pequeña carencia quede en un segundo plano, todo ello sin caídas de frame.

En el apartado sonoro tendremos unas melodías aceptables, sin llegar a ser épicas pero que ambientan de manera notable la época en la que está basada el juego, todo ello aderezado con un doblaje en japonés que ayuda a sumergirse en la trama, algo que sería complicado si hablaran en un perfecto inglés en la época en la que está centrado. Eso sí, sorprendentemente, nos llega con textos en inglés, algo digno de mención tratándose de un juego de Sony y Japan Studio.

Como os hemos descrito durante el análisis, en este Oreshika: Tainted Bloodlines somos los portadores de una maldición que solo nos permite vivir dos años y para colmo estamos limitados a la hora de tener descendencia lo cual hará que tengamos que seleccionar muy bien, dentro de nuestras posibilidades, con quien decidimos tener un hijo o hija ya que mezclaran las estadísticas de los padres, todo ello mientras intentamos encontrar la forma de terminar con nuestra maldición.

Con un sistema de juego sencillo en lo que a combates se refiere es una propuesta interesante para quien no quiera complicarse mucho con complejos sistemas de batalla y esté interesado además en tener la posibilidad de desarrollar otros aspectos más allá de la lucha como el de aumentar y mejorar tu ciudad.

Lamentablemente estamos ante un título que no saca todo el potencial del que dispone PlayStation Vita, algo a lo que ya estamos acostumbrados, pero más allá de eso nos encontramos con un interesante apartado gráfico y un doblaje notable, aunque la nota negra nos llegue con la ausencia de subtítulos en español, aunque sí en inglés, francés y alemán.

68
Jugabilidad: 6.5
Gráficos: 7.5
Sonido: 6.5
Satisfacción: 7

Análisis

Oreshika: Tainted Bloodlines es una propuesta sencilla que nos invita a romper la maldición de nuestra familia con limitaciones de vida y descendencia. Con una mecánica de combate sencilla y un apartado gráfico curioso llega al mercado europeo sin subtítulos en español.