Análisis Grim Fandango Remastered (PS4)
El género de las aventuras gráficas tuvo en en el estudio LucasArts uno de sus principales exponentes. Casi todos los jugadores que a día de hoy empezamos a vestir canas disfrutamos de lo lindo con propuestas como Maniac Mansion, Monkey Island o Full Throttle, siendo el tremendo Grim Fandango uno de esos títulos que permanecen en la memoria de los aficionados al género, en particular, y a las buenas y divertidas historias en general.
Double Fine, estudio fundado y comandado por el que otrora fuera estrella del rock de LucasArts con permiso de grandes como Ron Gilbert, Tim Schafer, se ha encargado de efectuar unos leves retoques a la obra de culto clave de la compañía para que jugadores novatos en estas lides, así como seguidores incondicionales de las aventuras gráficas, puedan hincarle el diente en consolas, PS4 y PS Vita para ser más exactos.
La historia, evidentemente, se mantiene intacta tras su estreno en 1998. Tomamos el control de Manuel «Manny» Calavera, un vendedor de viajes de La tierra de los muertos que descubre algo turbio en su empresa. En LaPS4 no somos muy dados a ofrecer información sobre las historias de los juegos más allá de unas breves pinceladas sobre el argumento, pero en el caso de Grim Fandango resulta esencial que sea el jugador el que descubra toda la trama ideada por Tim Schafer y un reducido grupo de guionistas en estado de gracia.
Como ya sabréis los que jugasteis a la propuesta en su formato original, Grim Fandango apuesta por unos entornos tridimensionales en los que podemos mover al personaje libremente, cuestión que ha resultado de lo más acertada a la hora de llevar su control a DualShock 4 o a la propia PlayStation Vita. El nuevos sistema presenta un control relativo a la posición de la cámara, por lo que resulta mucho más cómodo a la hora de moverse por los entornos. No obstante, los más puristas podrán utilizar el denominado modo tanque, que recupera el control original al hacerlo relativo al personaje. En PS Vita, además, es posible moverse utilizando la pantalla táctil de la consola.
Grim Fandango Remastered también permite alternar entre la versión original del título y la remasterizada simplemente pulsando un botón, lo que nos permitirá descubrir los leves cambios visuales que se han desarrollado para la ocasión. El principal problema del título, que ya estaba presente en su versión de 1998, reside en la complejidad de algunos puzles, que requieren paciencia y habilidad para, por ejemplo, realizar una acción determinada en un momento concreto, algo que no importará a los veteranos del lugar pero que puede volver locos a los neófitos en este tipo de aventuras.
A nivel visual, Double Fine se ha limitado a adaptar los diversos personajes, sus texturas e iluminación a la alta definición, sin realizar ningún trabajo adicional en los fondos y escenarios. Es completamente cierto que los paisajes y lugares que visitamos a lo largo de la aventura resultaban una delicia en 1998 y siguen siendo igual de atractivos a día de hoy, pero no esperéis cambios en ese sentido. El cambio se nota mínimamente cuando cambiamos de la versión original a la remasterizada, dejando un sabor agridulce en el jugador. Cambiar todo el apartado gráfico de la propuesta hubiera sido una cuestión más propia de un remake, pero no dejamos de preguntarnos qué hubiera conseguido Double Fine si hubiera retocado algunos elementos visuales más en su trabajo.
Otro aspecto que no ha sido muy trabajado es el ratio de la pantalla. Grim Fandango nació en la época de los 4:3, por lo que resulta ideal jugarlo de esta forma, pudiendo elegir el usuario entre hacerlo con unas bandas negras a los lados o unas decoradas con diversos motivos propios del imaginario del día de los muertos. Si optamos por la versión 16:9 nos encontramos con una pantalla ensanchada y algo estirada que no termina de cuajar del todo bien. Double Fine también apuesta por mantener intacto el sistema de guardado de la propuesta, que se olvida de los contemporáneos y automáticos métodos para obligarnos a guardar manualmente cada cierto tiempo si no queremos perder nuestro progreso ante posibles problemas.
Y es que, y esto si que resulta molesto, no se han solucionado todos los problemas que el título ya presentaba en 1998. En PlayStation 4 hemos visto como se corrompía nuestra partida por culpa de algún bug, mientras que en PlayStation Vita hemos tenido que reiniciar la aplicación por culpa de un cuelgue inesperado en el escenario. Este tipo de problemas son los que realmente impiden que la experiencia de juego pueda engatusar a las nuevas generaciones, por lo que esperamos que sean solucionados a la mayor brevedad.
Por lo demás, se ha mantenido intacto el magistral doblaje al español del título, cuestión que aplaudimos con todas nuestras fuerzas y que nos permite disfrutar de un trabajo tan excepcional como el realizado con la banda sonora del título. Los fans de Tim Schafer y de la época dorada de las aventuras gráficas podrán disfrutar de los comentarios del creador del juego mientras disfrutan de sus partida, descubriendo un montón de curiosidades sobre la propuesta. Grim Fandango Remastered cuenta con función cross-buy y cross-save, por lo que sólo deberemos pagar una vez por él para jugarlo en PS4 y PS Vita, pudiendo disfrutar de nuestra partida en cualquier plataforma sin miedo a perder los avances.
Grim Fandango es historia viva de los videojuegos y la oportunidad de disfrutar de una versión remasterizada en consolas de sobremesa y portátiles resulta única. Es indudable que nos encontramos ante uno de los juegos mejor escritos de la historia del sector, pero sigue arrastrando problemas que ya estaban presentes en 1998 y que deberían haberse solucionado. Los jugadores que disfrutaron del título original no deberían dejar de echarle el guante, mientras que los novatos interesados quedarán más que satisfechos. Puede que el resto, eso si, no terminen de verle la gracia a esto de las aventuras gráficas.