Folklore

Sin hacer ruido, así nos llega Folklore, una aventura con tintes de rpg de Game Republic (Genji y su secuela) exclusiva para Playstation 3. De la mano de Yoshiki Okamoto, productor de Devil May Cry o Resident Evil entre otros, desembarca este juego de ambiente fantástico y escenarios oníricos.

Aunque localizado en la Irlanda actual, la acción nos sitúa, inicialmente, en el pintoresco pueblo de Doolin, donde las barreras entre el mundo de los muertos, o Netherworld, y el de los vivos son fáciles de traspasar. Sin embargo nada de esto saben los dos protagonistas de la aventura: Ellen, una joven que recibe una carta de su madre fallecida diecisiete años atrás, y Keats, reportero especializado en lo paranormal que acude a Doolin en respuesta a una llamada de auxilio. Así se empieza a tejer la trama que convierte a Ellen en mensajera entre el mundo de los vivos y el de los muertos, y a Keats en guardián de la mensajera, y que les llevará a través de los distintos mundos de Netherworld, creados a partir de las memorias y recuerdos de los muertos.

Folklore nos presenta un estilo de juego singular, para lo que estamos acostumbrados hoy día, ya que nos brinda la oportunidad de estructurar nuestro avance en la aventura eligiendo el personaje a controlar en el comienzo de cada capítulo. De esta manera podremos alternar personajes en cada capítulo o recorrer todos los mundos con uno sólo de ellos para luego cambiar. Elijamos la opción que elijamos, deberemos completar todos los capítulos con ambos personajes. Esto, que resulta cuanto menos curioso ya que cada personaje ve la historia desde su punto de vista, complementándose entre ellos, es uno de los puntos fuertes a la par que uno de sus inconvenientes para algunos tipos de jugadores, ya que rejugar los mismos niveles dos veces, aún a pesar de los cambios argumentales, puede llegar a resultar un poco repetitivo. Sin embargo esto se ve compensado por una trama sólida, trabajada, original y narrada de manera excelente. A todo esto contribuye un sistema de combate en tiempo real, al estilo de los action rpg clásicos, pero aderezado por el sistema de uso de las criaturas que habitan Netherworld: los Folks.

Y es que no llevaremos espadas mágicas, armas de fuego ni nada parecido, nuestro método de combate serán los mismos folks a los que nos enfrentamos, de los cuales absorberemos su ID (como su esencia) gracias a los poderes que se nos otorgan al comienzo del juego: la Capa de Sidhe, en el caso de Ellen, y los Poderes del Guardián en el caso de Keats. Para conseguir esto, en Game Republic han optado por usar las funciones del sensor de movimiento del Sixaxis, con lo que para lograr las ID’s deberemos primero debilitar a los folks y luego “tirar” de ellos, aunque esta acción puede variar dependiendo del Folk que enfrentemos.

Otro aspecto que llama la atención es la forma en la que se narra el juego y la presentación de los diálogos, alejándose de la tendencia habitual de diálogos hablados (aunque los hay, pero escasos) y las conocidas CG´s narrativas, optando por un aspecto visual mas cercano al cómic. Encontraremos varios tipos de diálogos: uno cuando hablamos con un habitante de Doolin o Netherworld en el cual aparece en pantalla el personaje generado con el motor del juego y las líneas de dialogo, los diálogos narrativos y cercanos al cómic, que son los que hacen avanzar la historia, y en algún caso dialogo hablado.

Conforme avancemos, iremos consiguiendo más y más ID’s, cada una con su habilidad única, que deberemos combinar en grupos de cuatro, asignándolos a los cuatro botones principales de control. Dispondremos de un menú pulsando L2, accesible sólo mientras nos encontremos en Netherworld, donde podremos elegir el Folk que queremos asignar y una breve descripción de sus poderes. Hay hasta un total de cien folks en el juego, pero Store mediante se podrá ampliar dicho número.

A la hora de elegir personaje, la diferencia más notable entre Ellen y Keats es la habilidad de este último para entrar en Trance, con lo que ganará un tiempo limitado de invulnerabilidad y sus ataques serán más poderosos. Para esto deberemos de cargar una barra que aparece en pantalla y que se nutre de las ID´s de Folks que vayamos absorbiendo, una vez llena solo tendremos que pulsar L3 y R3 simultáneamente para activar la transformación. En el caso de Ellen a lo largo de los mundos iremos consiguiendo una serie de capas, cada una con un efecto distinto sobre Ellen.

Básicamente el juego está estructurado en capítulos, los cuales tienen su inicio en el pueblo de Doolin. En cada uno de ellos la trama nos guiará hacia los diferentes reinos de Netherworld para cumplir nuestra misión, diferente en cada caso. La estructura de juego es clásica: avanzar en cada nivel combatiendo folks y hablando con los habitantes de dicho mundo, abriendo caminos bloqueados y recorriendo toda su extensión hasta llegar a un “jefe final”, conocido como Folklore.

Aparte de la aventura principal, a lo largo del juego se nos plantearan diferentes misiones secundarias, las cuales podremos completar o no, que variaran entre enfrentarse a distintos folks, conseguir distintos tipos de objetos, etc. A través de la Playstation Store podremos descargar nuevas misiones secundarias así como nuevos Folks y trajes para personajes.

El control durante la exploración es sencillo: moverse con el stick izquierdo, con el derecho moveremos la cámara durante los combates, con los botones principales usaremos a los Folks que hayamos seleccionado, fijaremos un enemigo pulsando L1, para absorber las ID de los Folks mantendremos pulsado R1 y realizaremos el movimiento oportuno con el Sixaxis, con R2 realizaremos una acción evasiva, mediante el botón select accederemos a la pantalla de estado en la que veremos un mapa de la zona y como se encuentra nuestro personaje, pulsando start entraremos en el menú del juego en el que tendremos los objetos que hayamos recogido, una relación de los folks etc.

Hay que destacar en el aspecto jugable los enfrentamientos con los Folklores, en estos casos no solo nos limitaremos a “machacar” botones sino que cada enfrentamiento con estos seres tiene su propia estrategia (la cual averiguaremos mediante las páginas de libros que nos iremos encontrando en cada mundo), esto hace que dichos enfrentamientos sean de lo más interesante y variados.

Otro de los muchos buenos detalles del juego es que dispone de un editor de niveles, sencillo pero con interesantes posibilidades, mediante el cual podremos crear nuestras propias mazmorras y compartirlas con otros usuarios a través de Playstation Network, pudiendo jugarlas nosotros mismos.

GRAFICOS

Detallista y de gran belleza, así se podría resumir el apartado grafico de Folklore. Posiblemente nos encontremos ante el juego visualmente más original y preciosista de la actual generación. En el aspecto técnico, nos encontramos ante un juego sólido que hace uso del casi omnipresente motor Havok, con un modelado de personajes muy correcto y una gran demostración de destreza artística y técnica en lo que a diseño de Folks se refiere. Los escenarios cuentan con una amplia gama de detalles que los dotan de vida e identidad propias, siendo todo generado en tiempo real sin fallos recurrentes hoy día como clipping o popping. Los efectos visuales en batalla son correctos, aunque es de destacar la espectacularidad del uso de los folks en combate. El juego se mantiene fluido en todo momento salvo en determinados combates, con gran numero de folks involucrados, donde se nota un leve descenso de framerate. La iluminación en general es correcta y cumple sobradamente su función.

El punto fuerte de Folklore es, sin duda alguna, su apartado artístico. Cada mundo que se visita tiene su temática bien definida y perfectamente expresada por la paleta de colores elegida por los artistas del juego, que representan de manera magistral el mundo de ensueño que se extiende ante el jugador. Cada reino de Netherworld tiene su propia flora característica, además de diferenciarse claramente en la variedad de Folks según el reino que visitemos.

Antes se ha mencionado el excelente diseño de los Folks y Folklores, y es que no es para menos. El trabajo del equipo artístico en este campo no puede definirse de otra forma más que sobresaliente, creando una gran variedad de Folks sin caer en la repetición ni en tópicos. A nivel de personajes el trabajo es notable, tanto Keats como Ellen están muy trabajados, alejándose de los personajes típicos de este tipo de aventuras. Los habitantes de Doolin cumplen sobradamente en su papel de secundarios al igual que el diseño de los habitantes de Netherwolrd.

AUDIO

El juego posee una excelente y bellísima banda sonora con una gran presencia de temas a piano, y con unos efectos musicales que se adaptan perfectamente a cada situación que nos encontramos a lo largo de la aventura y no cae en la repetición de temas, cada reino posee sus propias melodías bien diferenciadas del resto. Destacar el tema que escucharemos a lo largo de la aventura en Doolin. La experiencia audiovisual que encontraremos en Folklore al combinar la belleza de los escenarios con su gran banda sonora, conseguirá introducir totalmente en la experiencia de juego.

Sin duda el aspecto más criticable del juego es su doblaje al castellano, en una palabra: mediocre. La elección de voces de doblaje ha sido bastante desafortunada aunque según parece el resto de versiones han corrido la misma suerte. Sin embargo este es un defecto menor dado que apenas hay conversaciones habladas durante el juego.

CONCLUSIONES

Estamos ante un juego cuidado hasta el más mínimo detalle (exceptuando el doblaje y algunos tiempos de carga), donde gráficos, música, efectos sonoros, arte y narrativa se aúnan de manera prácticamente perfecta para lograr un juego de gran originalidad y excelente factura.

Al jugar a Folklore nos sentiremos inmersos en una trama muy elaborada, entretenida y misteriosa, donde se entremezclan fantasía, mitología y leyendas hasta el punto de que a algunos podría recordarles a los mejores trabajos de Tim Burton, con el beneficio que se obtiene al participar directamente en la esplendida historia que se nos presenta.

A Favor:

-Una experiencia audiovisual única
-Diseño artístico sobresaliente
-Su originalidad
-Su fácil control
-Posiblemente el juego que mejor implementa el uso del Sixaxis.
-Una gran historia y personajes.
-Juego ampliable a través de la Pstore.
-Posibilidad de crear y compartir mazmorras.

En Contra:

-Excesivo numero de tiempos de carga
-Puede resultar demasiado lineal
-Algunas zonas pueden resultar repetitivas al rejugarlas con otro personaje.
-Doblaje al castellano mediocre.

Análisis realizado con la colaboración de Rafa Jurado.