Análisis Flower.
Ficha técnica:
Desarrolladora: Thatgamecompany.
Formato: Playstation Network.
Precio: 7,99 €.
Modo online: no.
Idioma: Completamente español.
Hoy día, por desgracia, se valora más un buen apartado gráfico que la satisfacción que deja el juego en el jugador. Desde hace un tiempo hasta hoy la Playstation Network se está identificando con unos ciertos juegos que por poco precio resultan muy satisfactorios.
En esta ocasión le toca a Flower, de los creadores de Flow que salió hace bastante tiempo en PSN, y que consigue realzar ciertos campos del preciosismo poco vistos en este mundo electrónico.
Aunque parezca una apuesta arriesgada, Flower es de lo mejorcito que hemos probado a día de hoy, perfecto para aquellos días de estrés en los que no queremos ver a nadie y no aguantamos más. Igual que estar una tarde de verano en una playa tranquilamente.
[BREAK=Gráficos]
Apartado gráfico.
Quizás es el apartado más detallado y que más salta a la vista al comenzar el juego. Si pudiéramos describir el apartado gráfico de Flower con una sola palabra sería dificil encontrarla, ya que entre ellas estaría bello, colorido o idílico. ¿Bello en qué sentido? Todo, la tranquilidad que transmite el juego sólo con el movimiento del pétalo en una eterna pradera, llena de plantas, aerogeneradores, surcos, valles o incluso el cielo es indescriptible.
El color abunda por todos los costados, ninguna partida es igual a la otra, encontraremos mañanas de primavera, con el cielo despejado, atardeceres veraniegos o incluso partidas nocturnas, con un toque siniestro y muy bien acompasado con la luminosidad a la que se otorga a nuestro enjambre de pétalos, que iluminan la pradera y encienden grandes bultos en el campo.
Idílico resulta todo, tan tranquilo y armonioso con el viento, gran protagonista del juego, que nos guiará en ocasiones y moverá de forma uniforme cada hoja o los aerogeneradores.
Lo más enigmático y sorprendente para algunos es la limpieza a nivel gráfico en pantalla y a la no inclusión de ningún tipo de indicador en la misma, no hay tiempo, ni siquiera un mapa, toda la pantalla abarca al juego, lo que da un toque naturalista muy de agradecer.
Durante el juego no hay escenas CG’s, sino algunas imágenes animadas que recuerdan a diseños preliminares. La ciudad en la que se alojan las macetas (cada maceta es un nivel) es gris, triste, monótona y nuestra misión será la de darle color y alegrarla.
[BREAK=Sonido]
Apartado sonoro.
El sonido de Flower está muy cuidado, muy minimalista y que sorprenderá por lo armonioso que resulta jugar y estar en contacto con el sonido. Las melodías están prefijadas de por sí, pero hay ciertos tonos graves o más agudos (dependiendo del color de la flor serán de un tipo o de otro) que iremos dando nosotros mismos al ir abriendo flores.
La música es muy relajante, música de piano que calzan perfectamente con el nivel, con acelerones en momentos determinados o pausado cuando dejamos a nuestro pétalo a su libre albedrío o iniciamos la partida.
El sonido del viento hará que la misma música varíe, igualmente que pasa al mover el pétalo, así cuando haya grandes rachas de viento la música se acelerará o tomará un tono más grave.
[BREAK=Jugabilidad]
Apartado jugable.
Por increible que parezca, es el apartado más simple del juego y de los mejores acabados. Tomaremos el control simplemente con el sensor de movimiento del mando, y podremos acelerar con cualquier tecla o bien frenar sin tocar ninguno.
En pasadas experiencias con el sensor, era un lastre, pero en Flower está perfectamente implementado, resulta muy suave y casi da la sensación de estar conduciendo. La dificultad crece dependiendo del color de la flor (si es rosa se acelera bastante) pero en general está bastante bien ajustada, sin ningún problema y que todo el que se haga con el mando podrá pasar un buen rato con el juego.
El juego posee gran variedad de niveles, que harán que maniobremos bastante, incluso rellenando regiones de luz, encendiendo grandes filas de aerogeneradores o surcando grandes cañones.
Además de todo eso, cuenta con un simple sistema de trofeos, y es de resaltar la descripción de algunos, que más bien parece una reflexión filosófica a una simple explicación de como conseguirlo, lo que aumenta el carisma del juego.
No tiene modo online ni modo multijugador, y dificilmente podemos imaginarnos su implementación, ya que no es un juego para competir, sino para pasar un buen rato tranquilos y relajados.
[BREAK=Entre tú y yo]
Flower desprende tranquilidad por todos los sentidos, y aunque parezca que para ello se tenga que recurrir a tonos un poco suaves y monótonos, no es del todo así. En Flower hay mucha variedad de situaciones (partidas de día, atardecer, de noche, y con lluvia) que harán que cada partida sea diferente a otra radicalmente, incluso parecerá que van discurriendo los días poco a poco, ya que muchas de ellas parecen distintas fases de un día por separado.
Quizás le haya faltado alguna situación diferente como puzzles (hay unos cuantos, pero algo sencillos) o quizás algún cambio de clima o algo parecido para hacerlo aun más largo, pero podemos asegurar que la duración que tiene es bastante gratificante al dinero gastado.
Como comentábamos al principio del análisis, es increible como un juego tan sencillo puede llegar a ser tan plancentero, sin errores gráficos o sin tediosas comparativas con juegos de otras plataformas. Un juego con el que desconectar del mundo exterior y si ya lo sumamos a un buen sistema de sonido la mezcla es aun más gratificante. Hay ocasiones en las que da ganas de dejar la consola encendida sólo escuchando la canción del juego en el menú de la consola.
[BREAK=Conclusiones]
Flower es un juego que quizás sin haberlo probado antes, nadie se atreva a comprarlo, pero una vez comprado o probado en casa de un amigo os hará completarlo hasta el final, ya que no es demasiado dificil ni muy largo, pero si muy variado.
Lo mejor:
– Un cuidado apartado gráfico.
– La música.
– Sencillez en el control.
– La variedad de situaciones.
Lo peor:
– Puede llegar a ser monótono a la larga.
– Quizás se pueda hacer corto.